El barómetro de la Generalitat, presentado hace unos días en València con un coste de unos 50.000 euros y que es el primero elaborado bajo mandato del Consell del Botànic, no incluye ni un sondeo sobre intención de voto ni tampoco estimación de resultados en el caso de que, en estos momentos, se celebraran elecciones autonómicas. Pero las preguntas sobre afinidad política sí permiten apuntar que, al menos de momento y con las cautelas que se deben tener en un escenario de máxima volatilidad del electorado, los socialistas mantendrían distancias con Compromís en la provincia clave que, a la postre, le concedió a Ximo Puig el liderazgo de las fuerzas de izquierda y, por tanto, la que le abrió las puertas del Palau de la Generalitat.

De forma global, la mayoría de ciudadanos de la Comunidad, de acuerdo con el muestreo, consideran que Compromís es la fuerza política que defiende mejor los intereses valencianos. Pero, sin embargo, bajando a los datos por provincia se evidencia que la formación de Mónica Oltra y a la segunda posición que cosecha en Castellón trás de los socialistas, impulsados sin duda por el impacto de Ximo Puig en su provincia. En Alicante, sin embargo, los socialistas y también el PP se imponen claramente en ese indicador a Compromís que, a pesar de todo, registra un avance en relación a barómetros anteriores. La defensa de los intereses de la Comunidad, en cualquier caso, era patrimonio exclusivo del PP en la época de las grandes mayorías absolutas de Zaplana o Camps. Ahora, sin embargo, lo dominan Compromís y los socialistas.

En la otra pregunta que revela opinión política y que está relacionada con la afinidad de los encuestados, las diferencias entre el PSPV y Compromís -a pesar de que también mejora registros- en la provincia de Alicante son todavía más claras, como se puede apreciar en el cuadro anexo que acompaña esta información. Los socialistas doblan en afinidad a Compromís en el conjunto de la Comunidad pero, a su vez, esa diferencia es todavía mayor en la provincia de Alicante. De nuevo, la formación de Mónica Oltra registra mucho mejores indicadores tanto en Castellón como especialmente en València lo que denota, a pesar de que la implantación de Compromís y su penetración institucional crece en Alicante, que la coalición continúa arrastrando su propio «problema alicantino».

Eso, de momento, es un balón de oxígeno para los socialistas. Como se recordará, en los comicios de hace dos años, Ximo Puig pudo superar a Oltra gracias a la provincia de Alicante. Con los resultados de Castellón y València sumados, era la actual vicepresidenta de la Generalitat la que llevaba ventaja. Viendo que Compromís, especialmente en los indicadores que marcan la defensa de los intereses de la Comunidad, continúa teniendo gran fortaleza en esas dos provincias, el resultado final de la provincia de Alicante vuelve a revelarse como decisivo para ver, dentro de una lucha de bloques, si los socialistas son capaces de mantener la distancia, como hasta ahora así parece, con sus socios.