Nunca el exconseller, exdiputado, excoordinador de las campañas electorales de 2007 y 2008 en Alicante y exalcalde de Alcoy ha estado más contento del divorcio entre los campistas y el reducto zaplanista de la provincia que ayer, momentos antes de declarar como testigo en el juicio por la financiación ilegal del PP. Gracias a ello, según relató Miguel Peralta, «nosotros no montábamos actos para el presidente (en alusión a Camps). Si el protagonista era él, lo hacia la regional con Orange Market. Ni por casualidad habría contratado yo con Álvaro Pérez». «¿Él era un hombre de Camps?», inquirió en ese momento el magistrado José María Vázquez Honrubia. «Eso era algo sobradamente conocido en el partido, de quién seguro no lo era es del PP de Alicante», respondió.
El exregidor alcoyano explicó que la dirección de Francisco Camps «era muy fuerte» y que casi no tenían relación hasta el punto de que en la práctica «se hicieron dos campañas diferentes» para las mismas elecciones. «No se contaba con nosotros para nada» y los actos que el candidato de la presidencia organizaba en la provincia eran en poblaciones amigas como Torrevieja, Elda o Benidorm, concretó.
No quiso meter el dedo en la llaga a sus excompañeros ahora acusados (dijo no conocer a Rambla y pronunció los nombres de Ricardo Costa y de David Serra aunque sin entrar en detalles) pero tampoco dejarse dentro todo lo que quería soltar: «Es cierto que había un presupuesto de Génova, otra cosa es que se distribuyera en el conjunto de los municipios o sólo se sufragaran determinados actos», concluyó.
En la misma línea, los exgerentes provinciales del PP en Alicante (Eugenia Cascales), Valencia (José Antonio Moscardó) y Castellón (Miguel Clarot), que también declararon como testigos, negaron haber contratado con la Gürtel y coincidieron en afirmar que no tenían capacidad de organización ni de decisión en los actos que dirigía la sede regional del PP.
Lo mismo que aseguró el número dos de Alfonso Rus en la Diputación de Valencia, Juan José Medina, investigado en caso Taula al igual que Moscardó. «No nos pedían opinión», dijo.
El exdirector general de Administración Autonómica de la Generalitat y exresponsable de la campaña de las generales de 2008 en Castellón, Enrique de Francisco, señaló que desconocía la existencia de un límite de gasto electoral porque le decían «que el dinero venía asignado desde Madrid».
