El alcalde de La Nucía, Bernabé Cano, ya es oficialmente séptimo vicepresidente de la Diputación de Alicante. Así lo recoge el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), que especifica como únicas funciones del nuevo cargo sustituir al presidente de la institución por orden de vicepresidencia, lo que en la práctica se traduce en un hecho poco viable al tener que darse la circunstancia de estar indisponibles previamente seis vicepresidentes para poder ejercer la sustitución.

Ninguna función más. El BOP, en su edición del pasado 29 de diciembre, atribuye a Cano la vicepresidencia con efectos desde el 22 de diciembre de 2017 y no contempla ninguna atribución nueva para el acalde de La Nucía, imputado por presunto «enchufismo» en el Ayuntamiento y desobediencia de una sentencia. Bernabé cobrará por su nuevo cargo cinco mil euros más al año. El presidente de la Diputación, César Sánchez, ya explicó a preguntas de este diario tras firmar el decreto para su nombramiento el día 21 de diciembre que el objetivo de la nueva vicepresidencia es potenciar el municipalismo.

El regidor de La Nucía empezó el mandato de César Sánchez sin competencias por los vetos de Cs al estar imputado -formación en la que militaba el tránsfuga Fernando Sepulcre antes de abandonarla- y suponer su sueldo y sus competencias una línea roja para el partido naranja. El pacto de investidura con Cs para hacer presidente a Sánchez acordó no dar nómina a los imputados por corrupción. Una situación que nada tiene que ver con la actual. Cano percibe desde este mes una nómina como vicepresidente de la Diputación por valor de 71.240 euros anuales; maneja el área con más presupuesto en inversión de la Diputación y forma parte del séquito de vicepresidentes provinciales creados por el presidente.