El pleno extraordinario para aprobar los presupuestos de la Diputación para 2018 se celebrará mañana, justo un día donde los grupos políticos estarán en la mirada en Cataluña, que celebra sus elecciones autonómicas tras la crisis derivada del desafío independentista. Pese a ser una sesión plenaria de calado, la aprobación de los presupuestos se llevará a cabo de una forma mucho más percibida que otros años. Tras un baile de fechas (primero se había programado para el 19 de diciembre), el presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez, ha elegido el día de los comicios catalanes para una de las sesiones más importantes del actual ejercicio político.

Por otro lado, la Diputación ha activado ya la comisión por el agua que se encargará de intentar alcanzar uno de los objetivos del presidente de la institución: un pacto provincial del agua. Este órgano, presidido por el catedrático de la Universidad de Alicante, Joaquín Melgarejo, y que cuenta con políticos, empresarios y regantes entre su composición, celebró su primera reunión lunes, donde se abordó establecer un estudio exhaustivo de la situación del déficit hídrico actual. En la comisión -en la que César Sánchez anunció que estarían representados todos los grupos políticos y en la que también se ha invitado al diputado no adscrito, Fernando Sepulcre- se acordó un calendario de reuniones, de forma mensual, para tratar la desalación, la sostenibilidad económica y sus costes; la gestión de derechos o temas directamente relacionados con el trasvase Tajo-Segura.

La comisión por un pacto provincial del agua es un intento del presidente César Sanchez de dar operatividad a la Mesa Provincial del Agua, de donde se han ido importantes referentes hídricos de la provincia críticos con su funcionalidad y con la gestión del equipo de gobierno en este área. Se trata de una réplica «en pequeño» de la Mesa del Agua que intentará ganar en operatividad y lograr una sola voz en la provincia en torno a las reivindicaciones en materia hídrica.