«No nos vamos a aferrar al sillón». Han pasado tres días desde que el Consell Polític Nacional de Esquerra Unida del País Valencià (EUPV) retirara la confianza al coordinador general David Rodríguez y a la diputada alicantina Raquel Pérez (que tiene previsto abandonar su acta), pero las comunicaciones el pasado sábado fueron tan difusas que dentro y fuera de la formación no terminaban de saber en qué punto se encontraba el partido. El aún secretario de Organización lo aclara: «Toda la ejecutiva hemos perdido la confianza del Consell Polític, por lo que no tenemos intención de continuar», explicó ayer el dirigente Toni Parrilla.

«Vamos a asumir responsabilidades, pero siguiendo los plazos que marcan nuestros estatutos», detalló el todavía dirigente de la formación de izquierdas. La dirección no tiene intención tampoco de alargar el proceso. En este sentido, en un correo interno dirigido a la militancia se comunica que el próximo 6 de noviembre tendrá lugar una ejecutiva «para tomar las medidas pertinentes después de la pérdida de confianza en la actual dirección». Es decir, que la propia ejecutiva reprobada será la que se reúna para dimitir formalmente, según se desprende de las palabras de Parrilla.

«Esta dirección no tiene ningún interés en agarrarse a los cargos ni al sillón. Los que viven de la política son otros», arremetió Parrilla. «A excepción de tres personas (uno es concejal) nadie de la ejecutiva está liberado, no reciben ningún tipo de sueldo. Los que sí que cobran son los otros», apunta el secretario de Organización, en referencia a la otra candidatura que disputó la dirección de la formación hace ahora un año (la lista encabezada por la diputada Rosa Pérez Garijo).

Tras la ejecutiva del próximo lunes, se convocará al máximo órgano de gobierno entre asambleas (el Consell), quien elegirá nueva coordinación y consiguientemente nuevo equipo directivo. Sin embargo, todavía no está claro qué procedimiento se seguirá. La actual ejecutiva se inclina más hacia la convocatoria de una asamblea en la que toda la militancia participe.

Sin embargo, desde la candidatura de Pérez, «Una nova esquerra», abogan porque sea el propio Consell Nacional quien elija nueva coordinación general. Con todo, el embrollo no termina ahí, ya que ese mismo Consell está en entredicho. Según una resolución de la Comisión de Garantías estatal de IU a la que la misma candidatura de Pérez recurrió, este órgano debería haber sido reconfigurado para atender a los cupos comarcales. El documento estatal concluyó que se deben ratificar todas las decisiones que ha tomado este órgano, supuestamente estaba invalidado por no haber respetado esas cuotas. Ahora, los números han cambiado, y el Consell Nacional en el que los de Pérez tenían minoría ahora se ha convertido en uno en el que tienen mayoría, la que ha destituido a Rodríguez.