Los socios del Botànic evitaron discrepar de nuevo en las Cortes a raíz de la crisis de Cataluña. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, aseguró no se alineará a favor de la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña si el presidente catalán, Carles Puigdemont, convoca elecciones «dentro de la ley». Para Puig, las próximas horas serán «decisivas» en este conflicto, y consideró fundamental que «los afectos y sentimientos positivos estén por encima de la visceralidad y la radicalidad» y que se defienda «el bien común y no se intente usar una bandera para pegar al de al lado ni se patrimonialice tampoco la bandera ni España».

Antonio Estañ, por su parte, advirtió de que la crisis territorial «va camino de cristalizar, por la irresponsabilidad de unos y otros, en la aplicación de 155» y reprochó al PSOE que en las crisis institucional, social y territorial «muchas veces se haya situado más cerca problema que de la solución». Por su parte, el portavoz de Compromís criticó a quienes hablan mucho de la Constitución pero la usan para enfrentar y se olvidan de los artículos que hablan de garantizar una vida digna, y de los derechos ciudadanos a una educación de calidad, una sanidad universal o una vivienda digna.

Por su parte, la presidenta regional del Partido Popular, Isabel Bonig, criticó la «doble vara de medir» de Compromís y Podemos por, según ella, no sumarse a una declaración en las Cortes para condenar los actos violentos del pasado 9 d'Octubre «tanto de grupos de extrema derecha como de la extrema izquierda».