Los grupos parlamentarios de Cs y PP rechazaro ayer apoyar una declaración institucional en las Cortes Valencianas de condena a las agresiones fascistas registradas el día de la celebración del Nou d'Octubre, Día de la Comunidad, que planteaban Podemos y Compromís y que había firmado el PSPV. Al haber sido rechazada por el PP y Cs y no contar con el apoyo de todos los grupos no ha podido ser presentada en la cámara valenciana como una declaración institucional, por lo que los grupos que la han propuesto ahora valorarán cómo incluir la iniciativa en un pleno.

Podemos y Compromís criticaron el rechazo de PP y CS a firmar el texto que habían impulsado. Al respecto, la síndica de Cs en las Corts, María Carmen Sánchez, justificó su rechazo al texto porque considera que «se está politizando un tema muy serio». «Hay que condenar la violencia siempre, venga de donde venga, pero no podemos aceptar que se hable de gestión política ineficiente» -como apunta el texto- cuando «hay detenciones y una investigación en marcha». Por ello, avanzó que Cs presentará un texto alternativo de condena «a la violencia» y que espera que cuente con el apoyo de todos los grupos políticos.

Por su parte, el PP explicó que se ha opuesto al texto por «la falta de apoyo expresa en el texto a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado». Además, criticó que la declaración institucional de Compromís y Podemos «pretendía señalar de manera crítica la actuación de la Delegación del Gobierno y de la Policía y recordó que en su momento el PPCV «ya emitió un comunicado de condena de los hechos violentos ocurridos el Nou d'octubre, que siempre condenamos vengan de donde vengan».

El Síndic de Compromís en las Cortes, Fran Ferri y el portavoz adjunto de Podemos, César Jiménez, lamentaron los hechos ocurridos ese día y explicaron que el objetivo del texto era hacer «una condena unánime» de lo sucedido.

Desde Podemos, César Jiménez explicó que lo que se pretendía era «condenar los incidentes», pero lamentó que Cs y PP no estén de acuerdo con el contenido íntegro del texto al no haberlo apoyado. «Nosotros queríamos poner de manifiesto nuestra posición de preocupación por la falta de gestión eficiente de recursos policiales para garantizar el derecho de manifestación, tanto por la mañana como por la tarde, y de celebrar el día de los valencianos», señaló Jiménez. Por su parte, Fran Ferri, de Compromís, aseveró que lo que se pretendía ayer era una «condena unánime» de los hechos. «Por la tarde no se pudo llevar a cabo una manifestación convocada legalmente y comunicada a la Delegación del Gobierno porque una serie de violentos fascistas salieron a la calle a impedirla», lamentó.

Críticas al Gobierno

Fran Ferri admitió no entender «la pasividad» de ese día de la Delegación del Gobierno «a la hora de utilizar bien los pocos recursos policiales con los que contaba para evitar que estos ultras llegaran» a la manifestación. «Hemos visto vídeos de la policía rodeando a estos ultras que iban hacia donde empezaba la manifestación. Esto para mí es muy grave y estos policías no deberían de haberlos dejado continuar», indicó, y dijo que se trata de actuaciones que deben condenarse.

Concretamente, la declaración institucional indica que el pasado 9 d'Octubre estuvo marcado por «la violencia fascista» e indica que ya durante la Procesión Cívica hubo «insultos, amenaza e intentos de agresión», mientras que, por la tarde, cuando tenía lugar la manifestación se produjeron «agresiones y palizas» y que hubo ciudadanos agredidos por sus ideas.