El Consell más longevo de la historia del autogobierno valenciano, nacido del Pacte del Botànic que en verano de 2015 rubricaron PSPV, Compromís y Podemos, conserva en lo que a todo el ámbito autonómico se refiere buena parte del capital político más de dos años después de iniciar su andadura. Se puede decir incluso que ese caudal se ha ampliado con el paso de los meses. Pese a las últimas decisiones del Consell, algunas cuestionadas por los jueces como el decreto de plurilingüismo, la valoración que recibe el ejecutivo valenciano cotiza al alza y no se resiente. Sí lo hace en cambio en Alicante.
Pero por partes. De forma global en la Comunidad, cuatro de cada diez valencianos entrevistados por Invest Group para INFORMACIÓN y Levante-EMV valoran de forma positiva la labor del gobierno de Ximo Puig y Mónica Oltra. En el bloque contrario, el porcentaje de los que la suspenden supera el 32% mientras uno de cada cuatro responde que la gestión es regular.
El dato relativo de ciudadanos que otorga una buena nota al ejecutivo ha descendido en el último semestre en siete puntos (en mayo de 2017 era del 47%), pero paralelamente el bloque crítico también se ha hundido al pasar del 41% al actual 32%, ocho puntos.
El resultado es que la brecha entre quienes aplauden el trabajo del Consell y los que deploran su gestión se agranda a favor de los primeros. Es casi de ocho puntos, el mejor resultado de la serie que este diario comenzó hace ahora dos años, en octubre de 2015.
Ahora bien, no todo son parabienes para el ejecutivo autonómico, que tiene su agujero negro en la provincia de Alicante, donde a diferencia de lo que sucede en el resto de la Comunidad ganan los críticos con el Consell (40% frente a 32%). Es de hecho en territorio alicantino donde ha habido más críticas a las actuaciones de la Generalitat, especialmente en lo que se refiere a la gestión educativa del conseller Vicent Marzà.
La coyuntura en Alicante contrasta con las otras dos provincias. Castellón es donde el Consell es mejor visto, aunque València refleja una mayor distancia (17 puntos) a favor de los que aplauden la política gubernamental.
Mientras, en toda la Comunidad, el presidente de la Diputación de València, Jorge Rodríguez, es el político más valorado (5,5 puntos), seguido de Mónica Oltra (5,1), cuyo conocimiento por cierto supera el 71%. El tercer político mejor valorado es el presidente, Ximo Puig, que también aprueba con un 5,1. Puig solo ha suspendido en una ocasión en cinco sondeos.
El presidente recibe la mejor nota en el segmento de edad más joven, el de 18 a 24 años y en el de 25 a 34 años, perfil de edad en el que la más valorada es la vicepresidenta Oltra que llega a obtener una nota de 6,3 en ese segmento. En cambio, Oltra suspende si el ciudadano que opina es mayor de 50 años, franja en la que Puig mantiene el aprobado.
En las filas del PP
Por su parte, la principal rival política de ambos, la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, es la política peor valorada entre los valencianos (3,9 de nota) y no ha llegado al aprobado en ninguno de los sondeos realizados en estos dos años. Bonig recibe mejor nota en Alicante y entre los mayores de 65 años. Según baja la edad de los encuestados también lo hace su valoración. El presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez, logra mejor nota que ella incluso en València. Sánchez también suspende, aunque su puntuación de 4,72 es la mejor del último año.
Entre los cuatro políticos que logran el aprobado en valoración se sitúa también la portavoz de Ciudadanos en las Cortes, Mari Carmen Sánchez (5 justo), en su primera aparición en esta serie. Es la primera síndica de Cs aprobada.El líder de Podemos, Antonio Estañ, recibe casi la misma nota (4,9) que su antecesor, Antonio Montiel. Estañ es mejor valorado en Alicante, de donde es originario.
En cuanto al grado de conocimiento de líderes políticos, el presidente es el líder político valenciano más conocido y también el que mayor evolución positiva ha experimentado en su valoración ya que ha aumentado un 0,39%. En cambio, la valoración de la vicepresidenta, Mónica Oltra, ha ido a la baja en estos dos años ya que ha perdido casi un punto (0,8%).
También la valoración de la lideresa de la oposición, Isabel Bonig, se sitúa a la baja. En los dos años ha perdido 0,5 puntos y queda lejos de aprobar. En cuanto al índice de relevancia (a partir de datos de conocimiento y valoración), el presidente se mantiene como el más relevante seguido de la vicepresidenta Oltra a muy escasa distancia.
