La presidenta del Partido Popular de la Comunidad Valenciana (PPCV), Isabel Bonig, afirmó ayer este lunes que quienes defienden el derecho a decidir del pueblo catalán «van en contra de los intereses de los valencianos» y «no deberían seguir en el Consell». A su juicio, este es «el momento del diálogo y no del enfrentamiento» y de que se desconvoque la manifestación por la financiación, prevista para el 18 de noviembre en València, «y se siente a dialogar de verdad el Gobierno con las comunidades autónomas».

Bonig aseguró que el pasado domingo «fue un día difícil y complicado» pero considera que se ha lanzado un mensaje «importante», el de que el orden constitucional y el Estado de derecho «se cumple siempre», según indicó en un comunicado.

La presidenta del PP instó al president de la Generalitat, Ximo Puig, a decidir «si quiere continuar gobernando con los radicales, los separatistas, con los que ayer se quitaron la careta, o volver a la senda de la moderación y de la convivencia». «Llega el momento en el que Puig tiene que decidir si quiere seguir gobernando con los que ayer se quitaron la careta, como Compromís, aplaudiendo ese golpe secesionista y ese quebranto de la libertad y el incumplimiento de la norma constitucional y el marco de convivencia», señaló.

Para Bonig, la actuación de Compromís el domingo fue «bochornosa», y señaló que la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, está «incapacitada» para seguir en el cargo y representar a los valencianos, ya que considera que quienes defienden el derecho a decidir del pueblo catalán «van en contra de los intereses de los valencianos».

Por su parte, el presidente de la Diputación de Alicante, el popular César Sánchez, instó al president de la Generalitat al cese de su número dos, Mónica Oltra; del president de Las Cortes, Enric Morera, y de «la mitad» de su Consell por considerar que han apoyado a los independentistas en Cataluña. En un comunicado, Sánchez manifestó que «Puig debe cesar a la mitad de su gobierno con Oltra y Morera a la cabeza antes de que sea tarde y sea cómplice».

César Sánchez argumentó que, teniendo en cuenta el «odio que acompaña siempre al nacionalismo»y donde se «ha llevado a la sociedad catalana», en los últimos tiempos ha comprobado «cómo Compromís y Podemos han apoyado a los independentistas catalanes». «Somos conscientes de que su hoja de ruta en la Comunidad es marginar el castellano y todo lo español hasta llevarlo a condición de foráneo: quieren que seamos parte de los Països Catalans y no de España.