3.000 euros cada minuto. Un informe de Ángel de la Fuente -uno de los expertos del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro- constata que esa será la cantidad que dejará de ingresar la Comunidad Valenciana en 2018 si el Gobierno no decide reformar el modelo de financiación autonómica. El documento, recientemente publicado y con datos de las liquidaciones de los presupuestos de 2015, certifica además que la Comunidad será una de las más castigadas -otra vez- en el aumento de fondos que recibirán las distintas autonomías el próximo año. De acuerdo con los datos recogidos en el texto, las arcas del Consell apenas recibirán del Estado un 1% más de fondos que este año. La media del aumento, según denuncia el diputado socialista en el Congreso Julián López Milla, rozará el 4% para el conjunto de comunidades. ¿Resultado? El déficit de financiación de la Comunidad Valenciana para 2018 quedará cuantificado en casi 1.600 millones. «Nos encontramos en una situación límite y ya perdemos 3.000 euros al minuto», lamenta el parlamentario socialista por Alicante.

La discriminación que sufre el Consell con la financiación no es nueva. Se remonta a los dos últimos modelos: el que estuvo en vigor desde 2004 bajo mandato de José María Aznar (PP) y el sistema actual, aprobado en 2009 con el socialista José Luis Rodríguez Zapatero en La Moncloa. Pero es que, además, este último modelo debía haber expirado en 2014. La periodicidad de los sistemas de financiación autonómica es quinquenal y en teoría la revisión del actual se tendría que haber producido en 2014. El Gobierno, sin embargo, la ha ido posponiendo desde entonces sine die.

Manifestación

La vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, se refirió ayer a la discriminación que sufre el Consell e hizo un llamamiento para que todos los agentes sociales y políticos de la Comunidad exhiban «unidad» en la reclamación de más fondos. «¿Por qué si estamos todos de acuerdo no lo escenificamos?», se preguntó Oltra a preguntas de los periodistas durante su comparecencia tras la sesión plenaria del Ejecutivo. Y añadió: «La infrafinanciación de la Comunidad es algo que no cuestiona nadie y cuenta con una posición unánime de todas las Cortes Valencianes, por lo que sería deseable que esa unanimidad tuviera traslado en una expresión pública de alianza con la sociedad». Esa unidad debería mostrarse, según dijo, en la manifestación que recorrerá València el próximo 28 de octubre.

A esa marcha no acudirán ni el PP, que firmó una declaración institucional en las Cortes contra la discriminación, pero más tarde dio un paso atrás, ni tampoco los empresarios de la CEV. «Hay que convencer de que la expresión de la unanimidad política es buena y no pasa nada», zanjó ayer Oltra.