Por pedir que no quede. Eso debe haber pensado el vicepresidente tercero de la Diputación de Alicante y alcalde de Busot, Alejandro Morant, que solicitó hace menos de un mes adherirse al Plan de Obras y Servicios de la institución provincial de 2018 -el plan de ayudas anuales más importante para los municipios alicantinos- pese a haber adjudicado el PP ya para su pueblo cerca de 800.000 euros a dedo para un pabellón deportivo. Morant, delegado también del área de Hacienda de la Diputación y alcalde de Busot, percibirá la ayuda nominativa (a dedo) más alta de la institución provincial después de la que se adjudicó para el municipio donde gobierna el presidente de la Diputación, César Sánchez, alcalde de Calp, y que llegó a los dos millones de euros.

Con esta asignación Busot, con 3.200 habitantes, recibirá más de 130 millones de las antiguas pesetas para un polideportivo que pretende ser referente en instalaciones deportivas municipales adaptadas a personas con movilidad reducida. Se trata de una cifra mayor de la prevista por la Diputación para ayudas en la prevención de incendios para los municipios de menos de 20.000 habitantes.

Morant admitió a este diario en unas declaraciones realizadas el 15 de junio que la asignación percibida para el polideportivo le impide recibir la del Plan de Obras de 2018. Sin embargo, este diario ha podido constatar que en el Palacio Provincial existe, con registro de entrada del 29 de mayo, una solicitud del Ayuntamiento de Busot relativa al Plan provincial de Cooperación de Obras y Servicios de competencia municipal para el año 2018. La solicitud no implica, en ningún caso, su aceptación.

La comisión informativa de infraestructuras de la institución aprobó con fecha 14 de junio, con los votos de los miembros del PP y del diputado Fernando Sepulcre, la concesión al Ayuntamiento de Busot de una subvención nominativa por importe de 777.146 euros para la «ejecución de cubierta y construcción de una pista polideportiva». La financiación de la obra será plurianual y en 2017 cuenta con 150.000 euros, mientras que el resto del grueso de la obra queda comprometido ya en los presupuestos de la Diputación para el año que viene. Con esta cantidad la institución cubre el cien por cien de la obra, que con toda probabilidad estará acabada en 2019, año de las próximas elecciones municipales.

La fórmula de las ayudas nominativas permite al municipio ahorrarse el porcentaje que sí pagaría mediante los planes de concurrencia.