Las relaciones del Consell con Europa se han normalizado esta semana después de la visita del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, a Estrasburgo y Luxemburgo para reunirse con el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y el vicepresidente del Banco Europeo de Inversiones (BEI), Román Escolano, a lo que habría que sumar la agenda política que la vicepresidenta Mónica Oltra ha desarrollado también esta semana en instituciones de la UE para avanzar en la implantación del Pilar Social Europeo de Derechos Sociales. La agenda europea a lo largo de esta semana pasa de la escala política a la técnica. Un equipo del Consell tiene previsto reunirse en las próximas horas con personal de la Dirección General de Competencia de la Comisión Europea para negociar a la baja las condiciones impuestas por Bruselas en la resolución que ha permitido a la Generalitat recuperar el control para gestionar la Ciudad de la Luz después de un largo conflicto, según ha podido saber este diario de fuentes autonómicas.

El principal escollo que se abordará en esta reunión será las sanción impuesta por Competencia para dejar sin actividad parte de las instalaciones de la Ciudad de la Luz vinculadas al complejo cinematográfico, algo en lo que el presidente de la Generalitat tiene puesto ahora mismo el foco. Las claúsulas de Bruselas incluyen que durante 15 años los platós y los edificio anexos no puedan dedicarse a actividades lucrativas, con una supervisión por la Comisión de sus usos no económicos y que, tras ese plazo, sólo pueda generarse actividad lucrativa mediante una venta al sector privado en condiciones de libre competencia.El objetivo con el que los técnicos del Consell se desplazan a la reunión con Competencia pasa por reducir el castigo de 15 a cinco años solicitando un lustro de rebaja y que, además, se computen los cinco que ya lleva paralizado el complejo. El cálculo que baraja el Consell es que la multa por las ayudas ilegales que la Generalitat otorgó para las instalaciones durante el gobierno del PP no supere el lustro y el cordón sanitario se pueda levantar en 2022.

Desde Presidencia mantienen que la negociación en estos momentos resulta más flexible después de los esfuerzos que se están haciendo para ofrecer una imagen «creíble y seria», una de las obsesiones del jefe del Consell y uno de los objetivos de los encuentros de alto nivel que mantuvo el martes Ximo Puig en Luxemburgo y Estrasburgo. De momento el primer paso, recuperar la Ciudad de la Luz, ya se ha dado a través de la fórmula de la dación en pago. El conflicto con Competencia es uno de los que el gobierno de Ximo Puig quiere limar en su intento por recuperar relaciones con la UE y «reconciliarse» con Bruselas después de fiascos como el de la Ciudad de la Luz, la devolución al Banco Europeo de Inversiones de 150 millones en fondos para los colegios por incumplimiento del contrato o la multa derivada de la manipulación de las estadísticas del déficit de la Comunidad.