El congreso federal del PSOE arrancó esta mañana en Madrid con casi un hora de retraso, con un baño de masas de un Pedro Sánchez aclamado y vitoreado por los militantes y sin anfitrión€ del PSPV. Cierto es que José Luis Ábalos, secretario provincial de València y nuevo jefe del "aparato" de Ferraz, tiene un papel de enorme relevancia en este congreso. Desde la tarde del viernes, Ábalos estuvo supervisando la acreditación de los delegados y esta mañana, en el inicio de los trabajos del 39 congreso, subió a la tribuna con el propio Sánchez para recibir el aplauso de los participantes en la convocatoria como uno de los grandes triunfadores de este proceso.

Pero también es verdad que una de las ausencias más sonadas en estas primeras horas del congreso es, sin duda, la del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que como se recordará había renunciado a su elección como delegado por Castellón. Al jefe del Consell le vino de "perlas" la victoria del València Basket frente al Real Madrid en la final de la Liga Endesa de baloncesto. Hoy a partir de las 18:30 horas tiene previsto recibir a los campeones y, posteriormente, a las ocho menos veinte cogerá un AVE para llegar a la villa y corte antes de la cena. Mañana, en principio, sí estará en la clausura, que huirá del formato clásico para convertirse en un macromitin para unas 8.000 personas. Se ahorrará el trago de una primera jornada de congreso en la que todo apunta que los mensajes que le enviará Pedro Sánchez -configuración de la ejecutiva, modelo de partido, gestos...- serán negativos y en clave de la batalla que se avecina en las filas del socialismo valenciano. A Ximo Puig, en realidad, le interesa lo que ocurrirá a partir de que mañana se eche el cierre a este cónclave

El ambiente dentro del PSPV, en estos momentos, es prebélico. El lunes, apenas 24 horas después de que finalice este cónclave, arranca acto seguido el plazo de presentación de candidatos a la secretaría general de los socialistas valencianos. Los afines a Ximo Puig dan por hecho que los "sanchistas" presentarán un rival al jefe del Consell y todas las quinielas apuntan a que el elegido para luchar por la secretaría general es Rafa García, alcalde de Burjassot. Pedro Sánchez y Ábalos -impulsor de la alternativa- tuvieron un gesto en el arranque del 39 congreso federal del PSOE, precisamente, con el dirigente que se perfila como rival de Puig. Colocaron en la mesa del congreso al mencionado Rafa García. Hace tres años, en el cónclave de 2014, que le eligió por primera vez, Pedro Sánchez contó con el propio Ximo Puig para ese mismo puesto. A buen entendedor€

Cargos socialistas próximos al "sanchismo" creen que, en estos momentos, la única salida que le resta a Ximo Puig es retirarse y renunciar a su intención de optar a la reelección como secretario general para evitar una batalla que puede afectar a la Generalitat. No en vano, el posible rival de Puig, el alcalde de Burjassot, Rafa García, es una persona próxima a la consellera Carmen Montón, partidaria de Pedro Sánchez. El presidente de la Generalitat no ve ningún motivo y está convencido de que muchos de los que optaron por el nuevo líder del PSOE frente a Susana Díaz ahora cambiarían de postura y le apoyarían. La guerra está servida.