El senador de Compromís Carles Mulet abrió la caja de los truenos el pasado miércoles cuando rompió una foto de Susana Díaz en la tribuna de oradores del Senado. La propia dirigente socialista ya dejó repercusiones en el Botànic al llamar «izquierda inútil» a Compromís, socio de gobierno de su compañero de partido y uno de sus mayores valedores, Ximo Puig. Ahora, la onda expansiva de la acción del senador castellonense se ha sentido también en el ambiente tenso que vive el PSOE debido a sus próximas primarias.

En concreto, el roce se produjo entre el alcalde de Valladolid, el «sanchista» Óscar Puente, y el secretario de organización del PSPV Alfred Boix. En un comunicado, el valenciano reclamó a Puente «respeto y disculpas a los socialistas valencianos y su secretario general y presidente de la Generalitat, Ximo Puig», después de criticar este el papel del jefe del Consell en el conflicto de Mulet. El dirigente socialista pidió que «no se mezcle el proceso de primarias, que está llevando a cabo el partido, con la gestión institucional que desde la Generalitat Valenciana se está realizando». «Estamos en un gobierno de coalición, que goza de buena salud y que atiende al mandato de las urnas de 2015», recordó Boix al tiempo que señaló que «los socialistas valencianos vamos a seguir manteniendo el máximo respeto a los partidos democráticos por responsabilidad institucional y política».

El secretario de Organización recordó al alcalde de Valladolid que el PSPV ya ha mostrado su malestar ante la «intolerable» actuación del senador Carles Mulet y reiteró que «es impropio de un demócrata atacar a un representante que ha sido elegido democráticamente». En esta línea ha incidido en que igual de «intolerables son los insultos de compañeros de partido» a quienes instó a no caer en «la descalificación y el insulto y respetar las diferentes opiniones».

Por su parte, Mulet manifestó ayer que la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, «se inhabilita» para liderar la izquierda y «este país» al calificar a Compromís y a Podemos como la «izquierda inútil», y le recordó que si aspira a ello tendrá que contar con estas fuerzas. «Si quiere que rectifique, primero ella, y que se coma sus palabras, que vea que no puede ir» por la vía del insulto, «y entonces bajaremos el tono», añadió, al tiempo que apuntó al presidente de la Generalitat. «No creo que Puig tenga que salir en mi defensa pero sí del gobierno del Botànic», al que Díaz «está insultando».

Mujeres por Díaz en València

Por su parte, Díaz volvió a insistir ayer en que Compromís es «la izquierda inútil». El mismo día en que había en València un acto organizado de mujeres en apoyo a su candidatura. Partiicparon en el acto en el palacio de la Exposición Micaela Navarro, vicepresidenta segunda del Congreso y expresidenta del PSOE; la eurodiputada Inmaculada Rodríguez-Piñero; la directora general de la Mujer de la Generalitat, María Such; la concejala Anaïs Menguzzato; la diputada Rosa Peris; la directora general de Vivienda ,Rebeca Torró; la alcaldesa de Algemesí, Marta Trenzano; la diputada Rosa Mustafà y María Sanchez, de Joves Socialistes.