El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el conseller de Educación, Vicent Marzà, fraguaron en su reciente visita a Finlandia la operación para que cada colegio público de la Comunidad Valenciana tenga un auxiliar de inglés oral nativo del Reino Unido en el próximo curso. «¿Es una broma?», respondió el ministerio cuando se le trasladó la iniciativa, porque el proyecto es estatal y lo que hará el Consell (este ejercicio hay 47 asistentes) es transferir al Gobierno los fondos para financiar que sean 996 ya en el curso 2017-18. El dilema era de dónde rascar el dinero cuando los presupuestos de la Generalitat de 2017 ya están en ejecución.

La solución se ha encontrado en la nueva radio y televisión públicas. No hay mal que por bien no venga, se puede decir. Como la puesta en marcha de «à.» va más lenta de lo previsto, se da por seguro que, como pasó en 2016, una parte de los 55 millones que tiene en los presupuestos de este año quedará sin destino. Su uso será derivado al pago de los auxiliares de inglés oral mediante una modificación presupuestaria, aseguran fuentes del Consell a INFORMACIÓN.

No obstante, no todo el coste del proyecto de Educación debería repercutirse a los presupuestos de este año, ya que los asistentes deberán estar en los colegios en el próximo mes de septiembre y su tarea se extenderá en esta primera experiencia hasta junio de 2018. De esta forma, la iniciativa ya podrá figurar en las cuentas del ejercicio próximo.

La nueva RTVV cuenta en 2017 con 55 millones de presupuesto procedente de la Generalitat, que autorizó asimismo que mantuviera el crédito no utilizado de 2016. La previsión es que no haya emisiones por algún medio hasta final de año. Tampoco se espera la contratación del personal definitivo (la selección aún no está a la vista). Así que el Consell cree que volverá a tener presupuesto sin destino.