La portavoz adjunta del grupo popular en las Cortes, María José Català, afirmó ayer que el Síndic de Greuges «saca los colores a Mónica Oltra por vulnerar principios de igualdad y equidad y, en consecuencia, crear dependientes de primera y de segunda». En un comunicado, Català hacía referencia a una de las valoraciones realizadas por el Síndic de Greuges en su último informe, conocido esta semana, en el que afirma que «vulnera los más elementales principios de igualdad y equidad al aplicar dos criterios diferentes respecto a la suspensión de dos años de percepciones -para cuidados del entorno familiar- en función de que la resolución estuviera aprobada antes o después de julio de 2015».

«Oltra da prioridad a los dependientes en función de si han llegado antes o después de esa fecha, que coincide también con la de su llegada a la conselleria», manifestó la diputada, que ha apuntado que el Síndic señala en su informe que «aunque recomienda el reconocimiento del mismo derecho a todos los dependientes, la conselleria no ha aceptado esta recomendación». En un comunicado, la dirigente popular destaca otra de las aportaciones que se realizan en el informe, como el hecho de que las respuestas solicitadas a la Conselleria de Igualdad «exceden, por mucho, los plazos establecidos».

«Ya sabemos, porque hemos visto y escuchado a la señora Oltra en otras ocasiones, que le disgusta profundamente que le digan que no hace bien las cosas, pero la Sindicatura de Greuges está precisamente para alertar de las situaciones que denuncian los ciudadanos y si cuando estaba en la oposición la figura del Síndic le parecía rigurosa ahora debe serlo también», indicó Català. La diputada agregó que el Síndic también «afirma que a lo largo de 2016 la situación ha empeorado y la tramitación de las quejas se eterniza, dando lugar en muchos casos, y sobre todo en los expedientes relativos a la aplicación de la Ley de Dependencia».