Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2017 van a terminar por abrir un frente -otro más- entre la Generalitat y el PP de la Comunidad. A pesar de la declaración institucional que se aprobó el miércoles de manera unánime en las Cortes censurando la escasez de inversiones en tierras valencianas, con la firma de Isabel Bonig incluida, ayer la presidenta regional de los populares dio marcha atrás. Justo igual que hicieron el viernes su vicesecreraria general Elena Bastidas y la diputada en el Congreso por Alicante Loreto Cascales. La recién reelegida lideresa del PPCV «salvó» a Rajoy de una manera un tanto peculiar. ¿Cómo? Culpando al Consell de izquierdas del déficit de inversiones del Gobierno central en tierras valencianas. «Vuelto a reiterar el apoyo del PP de la Comunidad a la reivindicación de la Generalitat de una mayor financiación estatal en los Presupuestos Generales del Estado para 2017, como es justo y necesario, pero ustedes (a Puig y Oltra) también tienen que ser responsables de sus actos, no toda la culpa la tiene Madrid ni en todo tiene que haber enemigo. Ustedes son responsables», aseveró Bonig durante un acto con los miembros de Nuevas Generaciones en València.

Y añadió: «Está muy bien pedirle a Madrid más financiación; sí, está muy bien, está bien pedirle más inversiones. Pero nosotros también pedíamos inversiones y financiación y ellos no estaban, no les escuché decir nada en 2010 cuando Zapatero nos dejó sin inversiones, no nos acompañaron cuando el PP pedía desde hace ya mucho tiempo el cambio del modelo de financiación».

Las reacciones a las palabras de Bonig no tardaron en llegar. El síndic de Compromís en las Cortes, Fran Ferri, cargó con dureza contra ella y consideró «lamentable» que sus primeras declaraciones tras la presentación de los PGE «sean para atacar al Gobierno valenciano, en lugar de exigir inversiones concretas a Mariano Rajoy». Por ello, Ferri instó a que los valencianos «se unan en este objetivo hasta las últimas consecuencias porque se juegan su calidad de vida». En un comunicado, el dirigente de Compromís expresó su preocupación ante los «mensajes contradictorios» de los dirigentes del PP, entre ellos «el delegado de Gobierno, Juan Carlos Moragues, que nos insulta poniéndose la medalla de haber ejecutado una ínfima parte del presupuesto del año pasado, o la vicesecretaria general del PPCV y diputada del PP en Madrid, Elena Bastidas, que ayer mismo (por el viernes) intentó convencernos de que tendríamos que estar contentos por ser el último territorio en inversiones».

El diputado del PSPV en las Cortes José Muñoz, por su lado, también quiso replicar a Bonig. «No vamos a consentir que los herederos de Carlos Fabra, José Joaquín Ripoll o Francisco Camps nos den lecciones de nada, ellos ya nos han demostrado con su nefasta gestión de los recursos públicos que saben mucho de inútiles y corruptos», ensalzó el parlamentario socialista a través de un comunicado.