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El PP plantea su congreso regional como un ariete contra el Consell

Los populares de la Comunidad debatirán tres documentos en los que se censuran las políticas de la Generalitat

El PP plantea su congreso regional como un ariete contra el Consell

El congreso regional que el PP celebrará en Valencia el 1 y 2 de abril no sólo servirá para renovar las estructuras orgánicas del partido. También se convertirá en un ariete contra las políticas que ha llevado a cabo el Consell de izquierdas desde que el PSPV, Compromís y Podemos sellaron un pacto mediado 2015 que apartó a los populares del poder dos décadas después. Las tres ponencias que ha diseñado el PP para su debate, y que ahora se encuentran en fase de presentación de enmiendas, suponen un duro ataque a las políticas que ha impulsado la Generalitat durante la actual legislatura. Desde la Educación, la Sanidad, las políticas sociales, los decretos para restar competencia a las diputaciones provinciales, el enchufe de altos cargos en los departamentos de salud, las actuaciones en materia tributaria... Los tres documentos son muy explícitos.

Ponencia de Estatutos

Bautizada como Ponencia Política y Reglamento de Organización del PPCV, los populares incluyen en ese texto varios ataques directos al tripartito. Uno de los más duros es el relativo a Educación. «El chantaje lingüístico y la usurpación a los padres del derecho a elegir el modelo educativo de sus hijos son actuaciones incomprensibles e intolerables en una sociedad como la valenciana y para un partido como el nuestro que siempre ha defendido y protegido el derecho de la libertad», recoge el documento, en alusión al decreto de plurilingüismo que la Generalitat pondrá en marcha el próximo curso escolar. La palabra chantaje aparece una vez más, esta vez como compromiso futuro: «Suprimir el chantaje a los padres que supone que quienes elijan castellano como vehicular en la formación de sus hijos se quedarán sin la titulación en inglés».

Aunque en el documento no se menciona el «pancatalanismo» que tanto pronuncian los cargos del PP para referirse a Compromís, sí que hacen varias menciones expresas a Cataluña: «el PPCV considera que los habitantes de las tres provincias son valencianos de primera y no catalanes de segunda»; « el valenciano no puede consistir en una clonación del catalán»; y «no formamos, ni formaremos jamás, parte de los imaginarios Països Catalans».

Además, los populares lanzan un aviso al conseller de Educación, Vicent Marzà, y plasman una frase que, según algunos cargos del PP consultados, previsiblemente será enmendada. «El español es la lengua nacional por antonomasia», zanjan en el documento que ha coordinado la diputada en el Congreso por Alicante Loreto Cascales.

Ya al margen de las críticas al Consell, en esa ponencia se incluyen otros muchos aspectos destacados, como el código ético que pretende aprobar el partido a nivel regional y que contempla la petición de un certificado de delitos penales a todos los cargos con representación o a aquellos que quieran formar parte de una candidatura electoral, tal y como ya adelantó este diario en su edición de ayer.

Ponencia Económica

Bajo el título «La ruta de las oportunidades», los populares valencianos llevarán a su congreso regional un documento de 55 páginas en las que se plasman sus propuestas de futuro en materia económica y en las que se carga, otra vez, contra l0s actuales inquilinos del Consell.

Un ejemplo claro se da en el apartado de las diputaciones. Y es que el texto hace todo un alegato a favor de las instituciones provinciales en plena polémica por los decretos de coordinación que ha aprobado el Ejecutivo autonómico y que, en la práctica, han minado las competencias de las diputaciones. Al menos, todo apuntaba a eso, puesto que el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad acaba de asestar un varapalo a los intereses de la Generalitat y ha anulado por ahora esos decretos en materia de turismo y deportes.

Pues bien, el PP ha decidido incluir en la ponencia hasta ocho capítulos en pro de las diputaciones. «Son entes irrenunciables prestadores de servicios y promotores de cohesión social», zanja uno de ellos.

También se lanzan varios dardos al tripartito con la política tributaria como telón de fondo. «En tan solo 20 meses de gobierno del tripartito los valencianos hemos empezado a sufrir las consecuencias de su política fiscal. Hemos afrontado una subida de impuestos injusta y hemos sido testigos de un grave deterioro de las cuentas públicas», comienza plasmando el documento.

Acto seguido, los populares hacen un guiño a las rentas medias y altas, y se comprometen a «revisar» dos impuestos: el de Sucesiones y Donaciones, y el del Patrimonio, éste último gravoso para las rentas altas. «Es sabido que el Impuesto sobre el Patrimonio es injusto y confiscatorio; ya que supone una doble imposición, tanto en su generación como en su tenencia; distorsiona las decisiones de inversión; favorece la deslocalización de actividades empresariales, así como de capitales y penaliza el ahorro», señala.

Respecto al de Sucesiones y Donaciones, la ponencia se expresa en términos similares: «El impuesto de Sucesiones y Donaciones es un impuesto ideológico e injusto. Injusto porque grava cosas que han tributado varias veces anteriormente, desincentiva el ahorro y la principal fuente de transmisión de riqueza en la clase media, el piso de padres a hijos».

Ponencia Social

La tercera de las ponencias que se abordarán en el congreso regional será la social. Dividida en cuatro grandes ejes (Familia, Sanidad, Educación-Formación y Bienestar Social), el texto incide en las críticas contra el actual Consell por el decreto de plurilingüismo y sus «ataques» a la enseñanza concertada. «Defendemos el derecho a la libre elección de los padres en la educación de sus hijos y promovemos el llamado distrito único, y la complementariedad del modelo público y concertado de enseñanza, tanto en la educación obligatoria como en la no obligatoria (Infantil, Bachillerato y FP)», señala en el apartado educativo. Y añade: «Defendemos la libertad de los padres para elegir la lengua en la que sus hijos van a formarse, ya que son los primeros responsables de la educación de los mismos y por ello tienen el derecho de educarlos conforme a sus propias convicciones, tal y como contempla el texto constitucional».

Paradójicamente, este apartado no menciona ni en una ocasión el valenciano y, por ende, no se plantean propuestas concretas sobre su importancia en las escuelas. Si se aboga por una «enseñanza plurilingüe» con reconocimiento del nivel de inglés y de una segunda lengua extranjera, y se defiende la necesidad de promover intercambios con otros países de lengua extranjera.

En cuanto a la Sanidad, los populares apuestan por la colaboración público-privada y por «profesionalizar» los cuadros directivos de los departamentos de salud para evitar así el enchufismo de amigos, entre otros aspectos.

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