El «aparato» del Partido Popular se ha puesto a apretar al máximo el acelerador para que la victoria de Isabel Bonig en el próximo congreso regional sea clara e inapelable. El equipo de la presidenta regional del PP ya ha empezado la recogida de avales para ratificar su candidatura. No se trata de recolectar sólo las noventa firmas de afiliados que ponen como requisito los estatutos de la formación. Así que Isabel Bonig no sólo está solicitando la rúbrica de los principales cargos públicos e institucionales del partido. Quiere también la firma de un número apreciable de militantes. El objetivo, apuntaron fuentes populares, es que el listado que respalde la candidatura de Bonig tenga un equilibrio territorial con peso de las tres provincias, de cargos públicos y orgánicos para que tenga un respaldo claro de los principales dirigentes del PP y de un número apreciable de militantes para a su vez fomentar la participación en el congreso, convertido ahora en una gran asamblea.

Los primeros en avalar durante este fin de semana fueron los principales dirigentes del PP en la provincia. El pasado sábado, durante una jornada del grupo popular de la Diputación, respaldaron la candidatura de Bonig los principales dirigentes del partido en Alicante. Firmó José Císcar, presidente del PP en la provincia, y también lo hicieron el titular de la Diputación, César Sánchez, y Eduardo Dolón, vicepresidente de la institución provincial y secretario general del PP. También han avalado ya la lista de Bonig la número dos regional del PP y miembro de la ejecutiva nacional, la oriolana Eva Ortiz; y José Juan Zaplana, vicesecretario de los populares en la Comunidad y diputado en las Cortes por Alicante.

En el último congreso nacional se evidenció el peso que, en estos momentos, tiene el PP de Alicante en el escalafón de la formación. Isabel Bonig mantuvo a Císcar en la cúpula de Génova e introdujo, además, tanto a César Sánchez como a Eva Ortiz. De alguna manera, la fortaleza del liderazgo de Isabel Bonig depende, en gran medida, de la provincia de Alicante. Ayer se empezaron a sumar a la firma de avales dirigentes de las comarcas de Valencia como Vicente Betoret -también nuevo vocal de la dirección nacional del P pero enfrentado a Bonig- o Luis Santamaría, que aspira a hacerse con el control de la formación en el «cap i casal». Dirigentes provinciales subrayaron ayer, precisamente, el retraso a la hora de ratificar la candidatura de Bonig frente a la rapidez con lo que lo han hecho los principales cargos del PP de Alicante.

El objetivo de la actual presidenta de los populares en la Comunidad es conseguir tal número de avales y de votos que se quede como única candidata después de la votación en urna del próximo 13 de marzo. Dirigentes populares no conceden ninguna opción a la alternativa que promueve José Luis Bayo, antiguo presidente de Nuevas Generaciones en Valencia. Ni siquiera para conseguir un respaldo mínimo que le permita llegar «vivo» al congreso. Hace unos días, de hecho y según estas mismas fuentes, Bayo ofreció en una reunión integrarse a cambio de retirar su candidatura a la presidencia regional. «Hay que resolverlo el día 13 en la urna y que el congreso sea una fiesta», definió de esa forma la situación un alto dirigente del PP de Alicante.