Antonio Estañ no se posiciona ni con Pablo Iglesias ni con Errejón. Su línea más cercana es la de los «anticapis», que han presentado también lista alternativa al congreso de la mano de Miguel Urbán.
Iglesias y Errejón presentan candidaturas distintas al Consejo Ciudadano Estatal con dos proyectos de partido distintos. ¿Era necesaria esa polarización?
Hay polarización, y aunque hay varios proyectos pueden convivir. De hecho, deben convivir.
¿Es bueno para Podemos alejarse de los «viejos partidos» para distanciarse de la «vieja política», o cree que es mejor más puentes con el PSOE y ser más institucionales, como propone Errejón?
Es que la única manera de distanciarse de los partidos clásicos es ser útil a la gente, y eso se consigue desde las instituciones y desde la calle. En algunos casos se tendrá que llegar a acuerdos con el PSOE y en otros denunciarle como causante de muchos de los problemas.
¿Y es útil la lucha interna por el poder?
En cuanto nos organicemos internamente después de un tiempo de mirarse hacia dentro, el objetivo es ser un partido unido y más útil. Si no conseguimos saber unir, que es lo que tiene que salir del Vistalegre, habremos dejado de ser útiles.
¿Puede tener ventajas el sector de Podemos de la Comunidad Valenciana si sale elegido Íñigo Errejón, que respalda a la cúpula autonómica del partido liderada por Antonio Montiel?
Se tiende a que cada autonomía tenga más independencia, al margen de la opción mayoritaria que salga. No creo que haya ventajas ni problemas si sale uno u otro porque sería un modo incorrecto de entender el partido y la descentralización. Y porque esa polarización a nivel nacional no es tal en la Comunidad. Es un error reproducirla a nivel autonómico, el contexto es distinto.
En las listas de Iglesias y Errejón hay cargos públicos de la provincia y de la Comunidad Valenciana. Están integrados en listas que representan la fractura del partido a nivel nacional. ¿Y no hay polarización en la Comunidad?
El posicionamiento es más definido en torno a Errejón. Luego hay quien puede identificarse con planteamientos de uno u otro a nivel estatal, pero luego actuar de forma distinta a nivel autonómico.
