Cuestión de días... o a mucho tardar de escasas semanas. La cúpula de Ciudadanos (C's) en la Comunidad Valenciana regresó ayer de la asamblea nacional del partido celebrada en Madrid con una consigna clara: las horas de Alexis Marícomo síndic de la formación naranja en las Cortes han de estar contadas. La distancia del actual portavoz parlamentario de C's en la Cámara autonómica y la línea oficialista del partido se ha ido agrandando con el paso de los meses, hasta el punto de que las relaciones son más que tensas, según admiten fuentes del partido. Sólo hay que echar un vistazo al perfil de Twitter del propio Marí o el de su nueva mujer, la eurodiputada Carolina Punset, para cerciorarse de que las posturas son diametralmente opuestas. Este pasado fin de semana se volvió a evidenciar esa distancia. En esta ocasión con kilómetros reales entre el portavoz parlamentario y la eurodiputada con la dirección del partido.
Tanto Marí, en su condición de síndic en las Cortes, como Punset, como representante de C's en Bruselas, deberían haber acudido a la asamblea que la formación clausuró ayer en Madrid y que sirvió, entre otros muchos aspectos, para refrendar el liderazgo de Albert Rivera. Tanto Marí como Punset, sin embargo, decidieron fijar para el sábado la fecha de su enlace y evitaron así el cónclave.
Ésta, sin embargo, ha sido solo una muestra más de esa división. Y, lo que es peor para el propio partido, las fricciones no se dan solo con Marí. El grupo parlamentario se encuentra completamente dividido y corre serio riesgo de rotura una vez que se ejecute el relevo del actual síndic.
Tal y como ha venido informando este diario, el grupo de C's en la Cámara autonómica navega entre dos aguas. Por una parte están los considerados críticos con la dirección autonómica, con Marí al frente y con otros cuatro aliados; mientras que en el bando opuesto se sitúan ocho afines a la dirección, con el propio Emilio Argüeso -el «jefe» de C's en la Comunidad Valenciana y Murcia- como cabeza visible.
De este último grupo, por cierto, forma parte el diputado ilicitano Emigdio Tormo. También coordinador del partido en la provincia de Alicante, Tormo se perfila como uno de los posibles sucesores de Marí en la portavocía, según ha tenido constancia este diario. Con todo, el primer nombre que maneja la cúpula autonómica es el de la parlamentaria alicantina Mari Carmen Sánchez. Sea quien sea el sucesor, un aspecto parece claro: la decisión del relevo está tomada.
Ahora sólo falta concretar el cuándo. Hoy mism0 podrían producirse novedades al respecto. La formación naranja reúne a su ejecutiva permanente y podría abordar el asunto en plena luna de miel del afectado. «La decisión será inminente. De febrero no pasa». Así de contundentes se mostraron fuentes del partido. No parece que haya vuelta atrás.
