La eurodiputada de Ciudadanos Carolina Punset, que abandonó la ejecutiva del partido el pasado octubre, confirmó ayer que no será candidata a presidir el partido, pero acusó a la actual dirección, con Albert Rivera a la cabeza, de pretender convertir la formación en «marca blanca del PP» tras el congreso del próximo febrero, con la renuncia a la socialdemocracia en el ideario. Además, criticó lo que considera un abandono del combate firme contra el nacionalismo y el «oscurantismo» con el que funciona el partido internamente.

En una rueda de prensa en Madrid y acompañada por distintos cargos públicos de Ciudadanos procedentes de Valencia, Alicante y Málaga, Punset aclaró que no va a presentar una candidatura a la presidencia del partido porque no tiene esa «ambición» y porque no cree que el problema sean las personas. Sin embargo, hizo un llamamiento a los afiliados de Ciudadanos para que se sumen a su «crítica leal» a la dirección por lo que calificó de «deriva equivocada».

Punset aseguró además que en el partido es difícil dar la cara para discrepar de la línea oficial y expresó su esperanza de que no haya represalias por su denuncia. A su modo de ver, son muchos los afiliados que comparten su opinión.

Respecto al debate sobre los nuevos Estatutos de Ciudadanos, la eurodiputada criticó que las primarias solo se apliquen para elegir al presidente del partido y su ejecutiva y no para el resto de cargos orgánicos, teniendo en cuenta que la formación naranja defiende la democracia interna. Asimismo, reiteró que el voto telemático está «manejado desde el partido», por lo que insistió en su defensa del voto presencial en urnas cerradas.