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Podemos echa a Belmonte definitivamente en pleno proceso de primarias

El Comité de Garantías estatal sostiene que la concejala incumplió el código ético

Ni se plantea dejar su acta ni mucho menos dimitir como concejala del consistorio alicantino ya que no se presentó a las elecciones de la mano de la formacion morada. La concejala Nerea Belmonte se mantendrá en el Ayuntamiento de Alicante como edil no adscrita después de que Podemos la haya echado definitivamente del partido por adjudicar trabajos a una empresa de su entorno en una resolución dictada por el Comité de Garantías estatal fechada el 8 de noviembre que resuelve su expulsión definitiva.

El documento, al que ha tenido acceso este diario, sostiene que la edil tránsfuga incumplió el código ético de Guanyar, coalición con la que se presentó a las elecciones en 2015. Así, según el texto, la coalición por la que se presentó sí tenía unas reglas deontológicas a las que Belmonte «tenía que someterse para poder concurrir a las primarias para conformar la candidatura». «Si ahora no le parecen buenas o lo suficientemente garantistas es algo que debió ponderar al momento de presentarse a las primarias y posteriormente a la hora de concurrir al Ayuntamiento de Alicante por esa lista», añade la resolución.

Belmonte justificó su recurso ante la Comisión de Garantías estatal para impedir su expulsión en que no se presentó a las elecciones locales con la formación morada y que, por tanto, ningún órgano del partido le puede exigir que entregue su acta. Además, la edil tránsfuga argumentaba que la gestora constituida temporalmente tras la expulsión de parte de la ejecutiva anterior -la que lideraba Jesús Bustos- por «pucherazo» en las primarias no es competente para exigirla.

Sin embargo, para Podemos, la edil firmó un documento ético que especificaba la prohibición de intervenir directa o indirectamente en los procedimientos públicos de contratación con empresas en las que sus representantes tuvieran intereses personales o familiares. Para la formación morada, la amistad e interés de Belmonte con uno de los responsables de la firma Techdata quedó acreditada en la resolución que realizó la comisión de la Comunidad Valenciana. Tras negarse la edil a entregar su acta, algo que le pidió también Guanyar y la propia gestora de Podemos constituida en la ciudad, el comité ratifica la expulsión de la edil con carácter definitivo al entender que su actitud contraviene de forma «muy grave» lo estipulado por los estatutos del partido. La formación morada ha entendido que la infracción se ha cometido de forma reiterada y que ha tenido trascendencia interna y externa a Podemos.

Nerea Belmonte señaló ayer a preguntas de este diario que la expulsión tendrá que acatarla y respetarla, aunque no compartirla, ya que entiende que la gestora de Podemos en Alicante no le puede reclamar el acta por no tener competencias para ello. Añadió que cuando la Comisión de Garantías se refiere a que incumplió el código ético de Guanyar no hay nada que respalde esa afirmación. «Yo no he contratado con ninguna empresa mía ni de mi familia y no he obtenido ningún beneficio», reiteró.

«Me acusan también de haber desobedecido a una gestora que no me puede reclamar el acta y que se constituyó después del pucherazo que hubo con la dirección de Bustos, a quienes por cierto, se les expulsó solo por un año pese a su manipulación», recalcó en referencia a la parte de la ejecutiva local a la que Podemos echó tras el pucherazo en las primarias de este partido en Alicante en 2015.

Criticó a la Comisión de Garantías porque «no se ha leído mis alegaciones ya que no las contesta por separado», y recordó su carácter de independiente para presentarse a los comicios. «Yo no me presenté con Podemos, ha habido una intromisión muy clara del partido y un abuso de poder de EU que Podemos no ha querido defender», incidió.

La expulsión definitiva de Nerea Belmonte de la formación morada se produce en pleno proceso de primarias en varias ciudades, entre ellas Alicante, donde la renovación interna del partido pretende poner fin a la gestora que ha estado casi un año funcionando como órgano de dirección en la ciudad.

Belmonte ha votado la lista de Carlos Torres. La edil todavía era militante de Podemos el lunes, día en el que, asegura, llevó a cabo Nere votación.

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