El presupuesto de la Conselleria de Hacienda y Modelo Económico para 2017 potenciará la Administración electrónica, aumentando su dotación en 30,4 millones de euros, y reconvertirá el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) en nuevo banco público de la Generalitat, con 5,2 millones más. Así lo manifestó ayer en las Cortes Valencianas el conseller Vicent Soler, quien compareció en comisión para explicar los presupuestos de su departamento para el año que viene, que ascienden a 286 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 16,14 % (39,7 millones más) respecto a este ejercicio. «Son cuentas en clave de futuro y en contra de la corrupción y el malgasto», indicó, al tiempo que anunció 13.000 nuevos ordenadores para Justicia y Educación.

Por su parte, el conseller de Transparencia, Participación y Cooperación, Manuel Alcaraz, quien compareció en comisión por videoconferencia al estar con el brazo en cabestrillo, aseguró que el presupuesto de su área «está marcado por el esfuerzo que supone la recuperación de la cooperación valenciana», una línea que representa más de la mitad, casi el 54 %, de la dotación total de este departamento autonómico. Así, ha destacado que la cooperación internacional al desarrollo crece en 5,33 millones de euros respecto a 2016, lo que supone un 40 por ciento, hasta alcanzar los 18,7 millones de euros de presupuesto.

Vivienda

La Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio ha reservado por su parte en el proyecto de presupuestos 5,9 millones para la futura Ley de Función Social de la Vivienda en el que será su primer año de aplicación, y consigna también 57 millones para el mantenimiento y mejora de la seguridad vial en la red de carreteras valencianas, según la titular del ramo, María José Salvador.