Tras rechazar el pasado pleno la adhesión al Código de Buen Gobierno que promueve esta legislatura el Gobierno valenciano, la Diputación de Alicante -con los votos a favor de todos los diputados, salvo de la representante de Esquerra Unida- aprobó ayer en sesión plenaria la adhesión al Código de Buen Gobierno de la Federación Española de Municipios y Provincial (FEMP), menos «sectario» según los populares que el que lidera la Generalitat Valenciana.