La Diputación rechazó ayer adherirse al Código de Buen Gobierno de la Generalitat. La decisión se tomó en el pleno, donde el PP y el diputado Fernando Sepulcre (ex de C's) votaron en contra de la propuesta de Compromís.

El diputado José Manuel Penalva (Compromís), en su defensa de la moción, justificó la necesidad de «revertir» la «sombra de sospecha» que la sociedad pone en los últimos tiempos sobre la política y quienes la ejercen. Tanto el PSOE, como EU y Compromís -como grupo proponente- votaron a favor de adherirse a este código, pero sus 15 diputados no fueron suficientes contra los 16 que suman PP y el propio Sepulcre.

El diputado de Buen Gobierno y Transparencia, el popular Adrián Ballester, defendió que el documento de la Generalitat Valenciana es «sectario», punto en el que coincidió Sepulcre, y abogó por aprobar uno concreto para la institución provincial alicantina, el que está ultimando la Federación Española de Municipios y Provincias. Para Ballester, el código del gobierno autonómico «prohíbe a los políticos ir a un acto religioso», extremo que Penalva puntualizó que era «falso».