El vicepresidente quinto de la Diputación, Adrián Ballester, ha sido el encargado de organizar las jornadas a petición de César Sánchez: «Si se cuestiona la existencia de las diputaciones es porque hay cosas que, o bien no se están haciendo bien, o bien no se comunican bien. Tenemos que contar lo que hacemos, el trabajo con los municipios de menor población e interactuar más con los ciudadanos. Si las diputaciones no existieran, habría que inventarlas». A. F.