El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el de la Diputación de Alicante, César Sánchez, coincidieron ayer en Aspe durante el acto de corte del primer racimo de la campaña 2016-2017 de la uva de mesa embolsada con Denominación de Origen del Vinalopó. Ambos dirigentes se mostraron más cercanos de lo que lo habían hecho hasta principios de verano, cuando se produjo un punto de inflexión en la guerra abierta entre la Diputación y el Consell al acercar posturas ambos mandatarios, que quedaron selladas con una visita de Puig a Calpe -donde Sánchez es alcalde- en el mes de julio y la firma de Pacto por el Empleo entre el gobierno autonómico y las diputaciones. Puig y Sánchez tienen pendientes sus deberes para este curso político: mantener su primera reunión oficial tras pasar más de un año desde que asumieron sus cargos.