Ximo Puig ha decidido no quemarse en el último incendio que amenaza a Ferraz: el debate sobre la postura del PSOE si Mariano Rajoy no consigue articular una mayoría parlamentaria por la derecha que le garantice la formación de gobierno. Si en otras polémicas internas, el presidente de la Generalitat y líder de los socialistas valencianos no ha dudado en mojarse sin medias tintas, en este momento de la partida prefiere quedar al margen.
Desde que empezó el coro de voces de dirigentes socialistas, con barones favorables a investir a Rajoy (el extremeño Fernández Vara) y otros alentando una alternativa de izquierdas (la balear Francina Armengol), Puig no se ha decantado ni hacia un lado ni a otro, por muchas veces (casi a diario) que se le ha preguntado.
El no a Rajoy aprobado por la ejecutiva del PSPV y la urgencia de que el líder del PP moviera fichas por la derecha para buscar una mayoría han sido los argumentos reiterados del jefe del Consell.
Ni siquiera la aparición del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero del que Puig se siente muy próximo en el debate ha alterado la posición del jefe del Consell, que ayer se limitó a remarcar que coincide con el exlíder del PSOE en que unas terceras elecciones no es un horizonte deseable.
El presidente de la Generalitat consideró ayer razonable un gobierno de coalición en España entre las fuerzas «más afines» y que Mariano Rajoy conforme una mayoría con el centroderecha que existe, «atomizado, pero existe», dijo.
Puig respondió así al ser preguntado por la opinión de Rodríguez Zapatero. El expresidente se ha pronunciado a favor de «un proceso de diálogo interno» en el PSOE para tomar una decisión sobre la formación de gobierno.
En opinión de Puig, para evitar las terceras elecciones, no hay que mirar al PSOE, sino que Rajoy tiene que «ser capaz» de conformar una mayoría con partidos de centroderecha.
El foco «no está» en el PSOE, aunque se quiera poner «interesadamente» en este partido, y afirmó que Rajoy tiene que conseguir «muchos más apoyos de los que tiene, porque no son suficientes» por ahora.
Según Puig, hay votos de centroderecha suficientes en el Congreso, por lo que espera que Rajoy «haga todo lo posible» para conseguir esos apoyos.
El presidente de la Generalitat señaló además que le gustaría que hubiera un gobierno para negociar la solución a problemas de la Comunitat Valenciana como la mejora de la financiación y las inversiones, la política agrícola o el medio ambiente.
