Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Una bajada de tensión

César Sánchez se alinea con Puig para desbloquear el plan conjunto por el empleo

Una bajada de tensión

La fuerte tensión que ha marcado el año de relación entre el jefe del Consell, el socialista Ximo Puig, y el presidente de la Diputación Provincial de Alicante, el popular César Sánchez, bajó ayer varios puntos y en picado durante el acto de presentación del plan de empleo del Consell y las diputaciones que, de forma conjunta, financiarán con cerca de 28 millones de euros (23 la Generalitat y otros 4,9 millones las diputaciones) los costes de la contratación de parados de larga duración en los ayuntamientos de la Comunidad Valenciana con el fin de dar oxígeno económico a los municipios para realizar contrataciones para ejecutar obras o servicios de interés social.

El reto de financiar la creación de puestos de trabajo en sectores desfavorecidos no merecía menos que una presentación pública en Valencia con todos los dirigentes que quisieran apuntarse el tanto. Y allí, en el Palau de la Generalitat, estaba el presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez, rompiendo el hielo con Ximo Puig y permitiéndole desbloquear el plan de empleo, enquistado por el conflicto entre la Generalitat y la institución provincial que agravó el famoso decreto del Consell que resta competencias en materia turística a la Diputación.

El tono que ayer emplearon para saludarse y charlar de manera informal ambos dirigentes, que aún no se han reunido oficialmente desde que asumieron sus cargos hace poco más de un año, fue cordial y fluido y mantienen en pie citarse tras el verano. Lejos parecen haber quedado puestas en escena resumidas en un lánguido apretón de manos. Ambos mandatarios están destensando la cuerda, forzada hasta el extremo por la convocatoria de las elecciones del pasado 26 de junio, y prevén sentarse a hablar de los intereses de la provincia de Alicante, una reunión que fuentes cercanas al presidente de la Diputación sitúan en entre los meses de septiembre y octubre.

Lo que no hizo Sánchez es olvidar. «Algunas ocasiones tendremos discrepancias y diferencias pero hoy [por ayer] demostramos que en lo importante tenemos altura de miras y trabajamos de manera conjunta», indicó el presidente de la Diputación en su escueta intervención ante Puig, los presidentes de las diputaciones de Valencia y Castellón y de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias. También estuvieron en la presentación del plan de empleo el conseller de Economía y del director general de Administración Local.

Sánchez resaltó que se trata de un pacto por «la responsabilidad de trabajar al servicio de los parados» y del «compromiso, con independencia del color político», dijo. El reproche por los decretos ya se encargó de hacerlo el presidente de la Diputación de Castellón, también en manos del PP. «Nos sentimos mejor firmando colaboraciones que asumiendo decretos», señaló el responsable de la institución provincial de Castellón, Javier Moliner.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats