La auditoría sobre la gestión de la Ciudad de la Luz al cierre de 2015, un documento que se ha conocido ahora, revela el caos que rodea la gestión del complejo cinematográfico alicantino que, como se recordará, no tiene ningún tipo de actividad. Las instalaciones continúan generando gastos y más gastos a la Generalitat, que es el propietario de la mercantil. El último año de la herencia del PP en estos fallidos platós de cine se tradujo en unas pérdidas de 10,3 millones, algo menos que el ejercicio anterior con un «agujero» de deudas que llega a la friolera de 232, unos 40.000 millones de las antiguas pesetas. Una cantidad que, al final, tendrá que acabar asumiendo el Consell en tanto que se trata del principal acreedor a través de otras sociedades. Un pozo sin fondo.
El último informe de fiscalización correspondiente a la etapa del PP revela, una vez más, la obligación que tiene la Generalitat de buscar una salida a la situación de la Ciudad de la Luz. Pérdidas en una gestión que sólo genera gastos, en su mayoría de mantenimiento, sin ingresos y un «agujero» astronómico de 232 millones, 20 millones en deudas a largo plazo y nada menos que 212 a corto. La auditoría destapa un auténtico caos en las cuentas de la entidad con créditos, en su mayoría concedidos por entidades públicas autonómicas, que la mercantil se muestra incapaz de saldar a su vencimiento. Una losa. En sus recomendaciones, los auditores reclaman que la gestión se desarrolle con transparencia hasta la liquidación de la sociedad.
La situación financiera de la Comunidad sigue siendo crítica, a pesar de registrar una mejoría con la labor del conseller Vicent Soler y una notable reducción del déficit en el último año. La Comunidad registró un desfase de 541 millones hasta el mes de mayo, un 0,51% del PIB a dos décimas del tope para todo el año pero una cantidad muy inferior a la de 2015. Con estas cifras, la Generalitat rebaja su déficit, con respecto al mismo periodo del año anterior, en 246 millones, dado que en mayo de 2015 alcanzó los 787 millones de euros, un 0,77% del PIB. En toda España, el Estado ha registrado un déficit de 21.343 millones en el primer semestre del año, un 1,4% menos que en el mismo periodo de 2015. En términos de PIB equivale al 1,9%, dos décimas menos que el déficit registrado hasta mayo, aún por encima del objetivo para este año.
El conseller de Hacienda, Vicent Soler, en un comunicado, destacó que la Comunidad «está haciendo los deberes». «Hemos introducido clarísimamente factores de rigor en la gestión», señaló el conseller, que reclamó a Madrid la reforma del sistema de financiación para recibir 1.325 millones adicionales. «La Generalitat reivindica ante el Gobierno central la reforma del sistema de financiación para los mismos recursos económicos por habitante que el conjunto de las comunidades», resaltó el titular de Hacienda. «Los valencianos no somos menos que nadie», recalcó Vicent Soler, quien a su vez subrayó que el sistema de financiación «está caducado desde el 1 de enero de 2014 pero el Gobierno se ha negado a resolver el problema».
