La vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, dijo ayer «respetar» la decisión de Dolores Salas de dimitir como secretaria autonómica por la «presión» a la que estaba sometida por el contrato de su hija en Fisabio, aunque «pueda parecer absolutamente desproporcionada, pero es su decisión y la respeto, con pesar pero la respeto», aseguró. Oltra valoró el trabajo de la investigadora con una trayectoria profesional «impecable». Es «una gran pérdida». Por su parte, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, dijo que era una «buena profesional que ha trabajado intensamente para mejorar la sanidad». En las Cortes, el PP se enfrentó con el tripartito al mantener la comisión en la que debía comparecer Salas como alto cargo.