Los cambios que Ximo Puig ha barajado en la segunda línea del Consell, y entre las que se encontrarían las secretarías autonómicas, se llevarán a cabo a finales de mes para no entorpecer la celebración del seminario que reúne en Torrevieja a todo el equipo de gobierno autonómico. La idea es poner el foco del evento en la gestión diaria del Consell y huir de los nombres en la picota, que para eso aún hay tiempo durante las próximas semanas. Tanto Ximo Puig como Mónica Oltra aseguraron que el asunto no se abordará en «el retiro» de este fin de semana en Torrevieja, pese a que la vicepresidenta hizo un guiño a esa posibilidad ante las constantes preguntas de los periodistas: «los cambios se harán sin anuncio y cuando el presidente considere». Oltra destacó que nunca se habló de cerrar cambios en el gobierno durante el seminario y que todo son «especulaciones». «Los cambios de gobierno no se hacen así. ¿Qué íbamos a estar, jugándonos a los chinos a ver quién entra y quién sale?», ironizó Oltra, quien sabe distinguir muy bien qué cosas forman parte del gobierno y qué otras del partido, dos ámbitos bien diferenciados en su conducta y que, asegura, que son la clave de que el mestizaje funcione bien.
Las miras sobre próximos cambios están puestas en el área de Sanidad, Economía y Comercio. Cabe añadir la posible entrada de Podemos en el ejecutivo, que obligaría a hacer hueco a la formación.
