Los representantes de Compromís que acudieron ayer al encuentro en Madrid con la dirección de Podemos y el resto de confluencias autonómicas para evaluar los resultados de las elecciones defendieron que el pacto de izquierdas aún es posible. Aunque aritméticamente lo es -con apoyos de partidos independentistas a la suma de PSOE y Podemos-, ninguna voz de peso ni en el socialismo ni tampoco en Podemos ha salido estos días a reclamarla tras el retroceso electoral de la izquierda y el avance del PP, el único de los cuatro grandes partidos que crece.

Sin embargo, fuentes de la delegación de Compromís aseguran que han puesto sobre la mesa que se valore la opción de intentar un gobierno «a la valenciana». El pacto de izquierdas al estilo de la Generalitat ya se planteó la pasada legislatura, pero el rechazo del PSOE a incluir a partidos independentistas y el desencuentro con la dirección de Podemos tras el pacto socialista con Ciudadanos hicieron imposible el acuerdo. «Es muy complicado, porque parece que el PSOE tiene ya la decisión tomada, pero lo vamos a intentar», dijo la secretaria de Organización de Compromís, Águeda Micó.

Petición del grupo parlamentario

Compromís ha insistido durante la reunión en la reclamación de un grupo parlamentario propio, en este caso de la coalición «A la Valenciana», que logró nueve diputados el domingo en la Comunidad Valenciana: cuatro de Podemos, cuatro de Compromís y uno de EU. Los representantes de la alianza rubricaron ante notario antes de las elecciones que acudirán al Tribunal Constitucional si no lo consiguen. Sólo una lectura muy laxa del reglamento del Congreso permitiría el grupo propio. Pero ni con mayoría de izquierdas en la Mesa del Congreso el grupo está asegurado, ya que tras las elecciones del 20 de diciembre fue el PSOE quien rechazó que Podemos pudiera tener cuatro voces, como ocurre ahora, la del grupo de Pablo Iglesias, En Comú Podem, «A la Valenciana» y las Mareas gallegas. Compromís se marchará al Mixto en el caso de que no se acepte su petición de un grupo propio.

En cuanto al análisis de los resultados del 26J, la coalición valencianista atribuye la desmovilización a la pérdida de ilusión de sus votantes porque no se dio el pacto de izquierdas en diciembre. En Compromís lamentan que los temas valencianos no han aparecido.