El año «del cambio» ha sido también año bisiesto. Un día más «de regalo» para un Consell que lucha contra el calendario y la larga lista de demandas que la sociedad exige y que, a tenor de los resultados electorales, exige con más celeridad. Con todo, ayer, con motivo de este primer aniversario del Consell del Botànic, el presidente y la vicepresidenta de la Generalitat quisieron sacar pecho de las medidas adoptadas en estos 366 días y expusieron un documento de 145 páginas con los logros. Ximo Puig destacó el «trabajo, estabilidad y honradez» de su ejecutivo, que ha tenido que encargarse de «levantar la hipoteca reputacional» de la Comunitat Valenciana y ocuparse de «desactivar minas».

Por su parte Mónica Oltra destacó que en estos doce meses se ha pasado «de la ocurrencia a la estrategia» y se ha tenido que «desescombrar, reconstruir y poner orden» tras la manera «caótica» de gestionar del PP. La vicepresidenta, que fue la encargada ayer de resumir los principales puntos del documento presentado con motivo de este balance anual, también aprovechó la ocasión para remarcar la herencia recibida.

Presidencia. Clamar contra la infrafinanciación, exigir la reforma del modelo de financiación o de infraestructuras como el Corredor Mediterráneo, son posiciones de fuerza que el bipartito deja en manos del propio presidente de la Generalitat. A su departamento han correspondido también los últimos meses la apuesta por la ordenación turística la creación del Alto Consejo Consultivo de RTVV.

Vicepresidencia e Igualdad. Poner al día los pagos a las personas que están dentro del sistema de la dependencia y adelantar los ingresos a los cinco primeros días del mes, fue uno de los logros que pudo apuntar ayer como propios Mónica Oltra. «Se han resuelto 15.659 nuevos expedientes, con 11.952 incorporaciones netas y se ha eliminado el copago en los centros de día y ocupacionales, además del abono de pagos pendientes a víctimas de la violencia de género o la elaboración del anteproyecto de ley de transexualidad», destacó.

Hacienda y Justicia. Ambas carteras, en manos del PSPV, presumieron ayer de eficiencia. La apuesta por la administración electrónica, la lucha contra el fraude fiscal o la reforma legal del sector público, fueron algunos de los puntos más destacados. En Justicia, pel gobierno del Botànic presume de haber logrado un acuerdo legislativo con el personal de la Generalitat y estar trabajando en una nueva Ley de Función Pública.

Educación y Cultura. La estrella de la gestión de Marzà, el programa Xarxa Llibres, es uno de los puntales del ejecutivo bipartito y así lo manifestaros ayer sus dos líderes en el balance de primer año de gobierno, sin olvidar el inicio del programa de escolarización de 0 a 3 años.

Sanidad. La atención sanitaria universal, las ayudas al copago farmacéutico, el Plan Salud 2016-2020 o la convocatoria de empleo público, se encontraron entre las medidas destacadas de la Conselleria que se lleva el grueso del presupuesto.

Vivienda y Economía. La Ley de Función Social de la Vivienda, «para pasar de una visión especuladora a la garantía de los derechos», la rehabilitación del parque público de viviendas o el Plan Litoral fueron algunos de los logros destacados por la vicepresidenta en su exposición. Por lo que respecta a Economía, se hizo hincapié en el plan Avalem, las acciones para impulsar la internacionalización o el apoyo al cooperativismo.

Agricultura y Transparencia. En Agricultura el gobierno del Botánico quiso ayer poner en valor el «giro» en política de residuos, el fomento de la producción económica o el plan de desarrollo rural. En materia de Transparencia, destacó la puesta en marcha del portal GVA Oberta o el Código de Buen Gobierno.