La cuestión territorial. Las concesiones a Cataluña, un asunto que será fundamental en los futuros pactos entre las distintas formaciones después del 26-J, es uno de los debates que copan la escena política y la opinión pública. De hecho, la cuestión territorial es una línea para partidos como el PSOE, PP o Ciudadanos, que ya han manifestado que no pactarán con «independentistas». Hoy INFORMACIÓN pregunta a los cuatro candidatos de las formaciones con representación parlamentaria: ¿Aceptaría que el Barcelona y el Espanyol jugaran la liga en una Cataluña independiente? Coordina: S. Llinares

Niego la mayor. Para que se produjera una eventual independencia de Cataluña habría que cambiar la Constitución para admitir el derecho a la autodeterminación unilateral. Cosa no imaginable mientras el Partido Popular tenga algo que decir en la política española.

Poco me preocupa dónde juegue el Barça o el Espanyol, lo que me interesa es lograr que Cataluña se quede en España y estoy convencida que si se acaba la política del búnker tendremos un futuro digno en el que la plurinacionalidad esté reconocida dentro de un proyecto común. Creo que el Madrid y el Barça no puede vivir el uno sin el otro, y la imagen más significativa de que con una política de cambio y reconocimiento se consiguen acercar es la del palco de la final de Copa del Rey con Carmena y Colau juntas.

No es cuestión de aceptarlo o no, sino de cumplir con las normas del fútbol a nivel internacional. Ante una hipotética independencia de Cataluña, que no contemplo porque no cabe en nuestro ordenamiento legal, no tendría sentido que equipos de otros países compitieran en la liga española. Es sorprendente, por no decir otra cosa, que algunos sólo busquen «desconectar» de España en aquello que piensan que les interesa. Con Cataluña hay que tender puentes y recuperar empatía. El fútbol también nos une.

Es un escenario que no nos planteamos porque somos un partido profundamente convencido de la unidad de España. Pero en el hipotético caso de que esto ocurriese, no seríamos nosotros quienes marcásemos fronteras a algo que une tanto a la gente como el deporte y sobre todo el fútbol. Defendemos la unidad y esto no sólo hay que decirlo sino que hay que demostrarlo. No contribuiremos a fomentar el separatismo en el territorio ni en el deporte ni en ninguna otra cuestión que ataña a todos los españoles.