A falta de menos de una semana ya para las nuevas elecciones generales la reunión de los dos barones socialistas se saldó sin una mención al candidato del partido de ambos. Hubo críticas al PP por «orillar» el Corredor Mediterráneo en favor del Central y por su inmovilidad en la financiación autonómica, pero Pedro Sánchez fue el gran ausente en los parlamentos de Ximo Puig y Susana Díaz, que respondían a un encuentro institucional y otro de partido. Alegan en el entorno del presidente que el objeto de la visita era económico. De ahí que los puntos espinosos, como la relación con Podemos y el futuro de los socialistas a partir del día 27, quedaran aparcados. Aún es campaña. a. g.
