El juicio por las presuntas irregularidades en la adjudicación de las obras de la Plaza Magallanes de Alicante ha entrado esta mañana en su recta final. El fiscal y la acusación particular ejercida por la dirigente socialista Carmen Sánchez Brufal han mantenido las acusaciones de prevaricación y falsedad documental contra los cinco imputados. Mañana será el turno para las defensas que expondrán sus conclusiones finales. Los acusados son el exvicealcalde y exconcejal de Atención Urbana de Alicante, Andrés LlorensAndrés Llorens, tres técnicos de esa concejalía y el responsable de la mercantil adjudicataria de las obras, Proinger.

El fiscal Anticorrupción, Felipe Briones, sostiene que el procedimiento por el que salieron a concurso las modificaciones del proyecto para remodelar la plaza fue un paripé, que pretendía dar soporte documental a una decisión que ya estaba tomada y para la que se saltaron todos los trámites administrativos. José María López Coig, letrado de la acusación particular, sostiene que los procesados usaron el Ayuntamiento como si se tratara de su cortijo particular. El fiscal pide para Llorens tres años de prisión y nueve de inhabilitación; mientras que la acusación particular reclama cuatro y once años respectivamente. Estos trabajos complementarios se adjudicaron dos meses después de la inauguración de las obras.

En la sesión del juicio de esta mañana han declarado los responsables de la Asociación de Vecinos La Voz, Felicidad Sánchez y José María Hernández Mata, que han confirmado que el colectivo estuvo presionando al Ayuntamiento para que diera celeridad a las obras y para que se cambiara el proyecto. Sánchez ha dado su respaldo al entonces concejal y ha dicho que se arrepentía si por culpa de esa presión, éste había acabado en el banquillo.

También ha declarado Carmen Sánchez Brufal, que presentó la denuncia que puso en marcha el procedimiento. Según aseveró, las fechas que aparecían en el expediente no se correspondían con la realidad y su deber era denunciar estas irregularidades. De las declaraciones de los testigos de esta mañana ha quedado patente que la fuente, para cuya instalación se modificó el proyecto, estaba ya instalada a comienzos de febrero de 2009. Un mes más tarde, en marzo, el Ayuntamiento, procedió a la apertura de plicas de las empresas interesadas en hacer esas mismas obras.