El alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, dirigirá personalmente la campaña socialista en la capital, según el acuerdo que tomó anoche la ejecutiva de la formación. Echávarri asume el control de los comicios para el 26J en su condición, a su vez, de secretario general de la agrupación local. Fuentes socialistas apuntaron que el primer edil tendrá apoyo para poder combinar su actividad institucional con la dirección de una campaña en la que la organización provincial y autonómica tiene un peso mayor.

En cualquier caso, son unos comicios muy importantes para el PSPV-PSOE. Muchísimo. En función de los resultados, los socialistas se juegan entrar en una etapa de desestabilización y turbulencias internas. El «sorpasso» que ahora prevén las encuestas en toda España ya se produjo tanto en la provincia como en la Comunidad en diciembre cuando la coalición Compromís-Podemos, a la que ahora se ha sumado EU, rebasó con claridad a los socialistas. Abrir una brecha mayor en el liderazgo de la izquierda supondría que el PSPV afrontara su proceso congresual en unas condiciones muy precarias.

Gabriel Echávarri, por tanto, corre riesgos con una decisión de la ejecutiva que le coloca en el disparadero interno en el caso de un mal resultado en los comicios del próximo 26 de Junio. Los socialistas en la capital, con las Hogueras de por medio, apuestan por una campaña en la calle y de baja intensidad. En principio, todos los indicios apuntan a que ni tan siquiera habrá un acto central en la capital. Sí está previsto, como adelantó ayer este periódico, que el líder del PSOE, Pedro Sánchez, visite la capital alicantina el día 23, uno de los días grandes de les Fogueres de Sant Joan. También barajan los socialistas -es casi seguro- que el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero visite la capital en Hogueras. Alfredo Pérez Rubalcaba también podría protagonizar actos en la provincia durante una carrera electoral muy atípica y que coincidirá con uno de los meses más festivos en la provincia.