La renovada ejecutiva del Bloc inició ayer su periplo con el 83% de apoyo entre los afiliados que asistieron al congreso celebrado en Feria Valencia. La dirección que lideran al alimón Àgueda Micó y Rafael Carbonell recibió 848 votos a favor, 134 abstenciones y 41 nulos.

El voto crítico, entre abstenciones y nulos, ronda el 20%, pese a tratarse de una ejecutiva de concentración, donde aparentemente nadie pierde. Fuentes del Bloc apuntaban al entorno del grupo de dimisionarios de la anterior ejecutiva, que abandonó antes de las generales de diciembre por el pacto con Podemos, para explicar el castigo. Finalmente no hubo ruptura, pero realmente estuvo cerca de producirse al mediodía del sábado: «Nos habéis tenido con el corazón en un puño», aseguraba a su llegada la vicepresidenta del Consell y referente de Compromís, Mónica Oltra. «Ha estado a punto de ser un trauma», reflexionaba en su despedida el hasta ayer presidente, Josep Maria Panyella.

También el portavoz en Madrid y uno de los hombres fuertes del Bloc, Joan Baldoví, rememoraba que el sábado se le pasó por la cabeza el congreso de ruptura del Bloque Nacionalista Galego (BNG), que condenó a esta formación a un espacio residual. «Hoy acaban las malas caras», proclamó.

En la clausura, la nueva coordinadora nacional, Àgueda Micó, calificó el congreso de «histórico». Lo hizo con un mensaje a los poderosos, los corruptos y los centralistas, que, según dijo, esperaban un Bloc dividido y débil. «Por equipo e ideas estamos preparados para impulsar al Bloc y a Compromís», resumió. También emplazó a los consellers de Educación, Vicent Marzà, y Economía, Rafael Climent, a perseverar en sus políticas.

El portavoz del Bloc, Rafael Carbonell, aseguró que el de este fin de semana ha sido el congreso más importante de la historia del valencianismo y fijó como grandes retos la reforma del modelo productivo y la recuperación de los medios públicos en valenciano. «Hemos llegado al Consell para quedarnos; hoy el Bloc es más fuerte y vamos a trabajar sin complejos en la construcción del País Valenciano», lanzó. Durante la clausura también intervino la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, que se refirió a Micó y Carbonell como «pareja de hecho». Aseguró que Compromís se hace «más fuerte» a cada paso que da. «El diálogo es una seña de identidad de Compromís y tomar las decisiones en el último minuto también nos hace más fuertes», dijo. Repasó los logros del Consell en el primer año y vaticinó que la candidatura conjunta con Podemos y Esquerra Unida será mayoritaria en las generales del 26 de junio. «Hay que rematar la faena, si los poderosos tiemblan es que vamos bien», aseguró la lideresa de Compromís.