El Gobierno valenciano ha rechazado hoy de nuevo la posibilidad de aplicar nuevos recortes y tanto el president, Ximo Puig, como la vicepresidenta, Mónica Oltra, han defendido la autonomía del Ejecutivo para pactar posibles aplazamientos de pagos con grandes proveedores.

Así lo ha indicado en la rueda de prensa posterior al pleno extraordinario del Consell para abordar medidas para la creación de empleo a preguntas de los medios en relación a la respuesta del Ministerio de Hacienda sobre la propuesta avanzada el pasado viernes por el Gobierno valenciano para el plan de ajuste que limite el gasto en la Comunitat que pide el Ejecutivo central.

Recientemente, desde el Ministerio de Hacienda se ha advertido al Gobierno valenciano de que si no cumple con lo que marca la ley, el Estado se haría cargo del pago de las facturas pendientes de sus proveedores "con la consiguiente retención de fondos autonómicos".

Hacienda respondía así al Consell, cuya portavoz, Mónica Oltra, avanzó que el Gobierno valenciano negociará un aplazamiento de pagos a grandes empresas suministradoras de la Generalitat, hasta un máximo de 170 millones de euros.

Preguntado al respecto tras la presentación del vídeo "Orgullosos de ser valencianos", editado por la Generalitat, Ximo Puig ha reiterado que "la Comunitat no puede recortar en servicios públicos porque ya gasta mucho menos que el resto de autonomías. Estamos dispuestos a dialogar y proponer".

"A final de esta semana se verá con más nitidez que la posición del Gobierno valenciano es justa, porque no podemos recortar más, no vamos a dejar a los valencianos tirados en la cuneta, como sucedería si se aplican los recortes que se nos reclaman", ha agregado.

A su juicio, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, "está incumpliendo al no propiciar un nuevo modelo de financiación". Asimismo, ha defendido la autonomía de la Generalitat para establecer acuerdos propios con grandes empresas proveedoras porque: "queremos pagar a todos y a tiempo, pero para ello debemos tener la financiación que merecemos".

"Si los recortes tienen un carácter menor estamos dispuestos a dialogar, no hemos dejado de hacerlo, no estamos por la bronca ni por la ruptura, queremos cumplir la ley de estabilidad, pero para eso hemos de tener una financiación adecuada; y además hay que cumplir la Constitución, que es más importante", ha agregado Puig.

En este mismo sentido, Oltra ha afirmado que "si el Gobierno valenciano llega a un acuerdo con proveedores dentro de sus competencias, ahí el ministro no tiene mucho que decir".

"¿Quién va a retener los pagos, quién tiene que venir a deshacer nuestros acuerdos...?" se ha preguntado Oltra "a no ser que (Montoro) se prepare el pase a un consejo de administración de una de esas empresas".

Asimismo, ha reiterado que los posibles ajustes que se acometan "no impactarán en los servicios esenciales, ni en los derechos de los ciudadanos ni en las pymes".

"Estas son las tres líneas que no negocia este Consell", ha subrayado Oltra, quien ha pedido "tiempo" para empezar a hablar con grandes proveedores en busca de posibles acuerdos para el aplazamiento de pagos.

Sobre el importe del recorte en el gasto, Oltra ha apuntado que el máximo es de 170 millones de euros, aunque cualquier cantidad inferior "es bienvenida"

Preguntada sobre partidas concretas a las que podría afectar la reducción de gasto, la vicepresidenta ha apuntado que no tiene el presupuesto "en la cabeza" y que el Consell todavía está trabajando en eso.

"Somos la única comunidad pobre y pagadora, eso no puede ser, para situarnos en la media nacional necesitaríamos entre 1.300 y 1.400 millones de euros más al año, aunque deberíamos estar por encima de esa cantidad dada nuestra situación económica", ha apuntado.

"Tenemos la esperanza de que el sistema de financiación se renueve, y aunque este proceso se pueda retrasar porque vamos de nuevo a alecciones, ha de ser retroactivo y compensar los desajustes de estos años", ha concluido.