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El Consell del PP gastó casi medio millón en el aire acondicionado del chalé de Calp

El baño principal contaba con hidromasaje y el menaje y la cubertería costaron 8.200 euros

Han pasado 17 años desde que la Generalitat compró y acometió una remodelación total en el chalé de Calp que iba a destinarse a residencia de la Generalitat para acoger a visitantes ilustres y al que finalmente la Agencia Valenciana de Turismo (AVT) no le dio ningún uso público oficial. Ni como hotel ni tampoco como extensión del CDT para cursos de hostelería y otras facetas de formación turística. En 1999, como hoy, el gusto refinado en materia de interiorismo tiene un precio. Las facturas de la reforma acometida en el inmueble nada más ser adquirido y de pequeñas mejoras posteriores, la última en 2008, a las que ha tenido acceso INFORMACIÓN evidencian que a la hora de vestir la obra no se escatimó en recursos públicos. En amueblar y equipar el dormitorio principal de la casa y el baño en él integrado, la Agència de Turisme se gastó 15.929 euros, que fueron abonados en al menos seis facturas.

La de mayor cuantía alcanzó los 5.707 euros. La menor, de 904 euros respondía a los trabajos y material para revestir el vestidor de la habitación. Otras dos facturas, de 4.334 euros y 2.637, también se cargaron a Turisme en concepto de amueblar el dormitorio principal del Casal d'Ifac. El «equipamiento del baño», con hidromasaje, costó 2.347 euros.

La relación de gastos acometidos por el organismo público autonómico entonces dirigido por Roc Gregori evidencia que no faltó detalle a la hora de vestir el chalé cuyo destino oficial, según trasladó en su momento el Consell presidido por Eduardo Zaplana, sería el de convertirse en residencia para visitantes ilustres. Entre los gastos de Turisme figuran varias facturas de ropa y menaje del hogar. Las primeras alcanzaron, al menos las de 1999, un total de 6.248 euros. Entre ellas figuraba una consignada como de «lencería», por 3.305 euros, que comprendía toallas «de lavabo, de baño y de bidé», mantas, sábanas y juegos de cama y tres mantelerías.

«Menaje» de cocina y una cubertería costaron más de 8.200 euros. Era la inversión en el «hotel» público. Luego se hizo otra inversión para adaptar la cocina y una dependencia como aula para que la casa prestara servicio dentro de la red de Centros de Desarrollo Turístico (CDT). La remodelación de la piscina y la construcción de una pista de pádel, con la iluminación para disfrutarlas de noche, costó 350.000 euros, como contó ayer este diario. En esa cantidad no se incluían los 3.568 euros en tumbonas y muebles de la piscina.

El precio de combatir el calor

Hubo otros capítulos que resultaron aún más gravosos en la puesta a punto del chalé adquirido en enero de 1999 con el argumento oficial de que la compra -con su parcela de 6.456 metros y tres colindantes por un total de 33.000- por parte de la Generalitat era «necesaria para llevar a cabo» la «protección y ampliación del Peñón de Ifach». Cuando los terrenos con la casa pasaron a titularidad pública, Medio Ambiente cedió el uso del chalé a la Agència de Turisme. Además de la obra en sí, el mayor concepto de gasto correspondió a la climatización de 730 metros cuadrados, sin contar las dependencias anexas.

Uno de los pagos por la instalación del aire acondicionado ascendió a 169.040 euros. Una segunda factura cargada a la Generalitat se elevó a 284.434 euros y comprendía, además de los aparatos de climatización, una parte del coste de instalación, como fontanería. Por trabajos y material de canalización de agua y de clima se abonaron otros 90.882 euros. La cifra incluíados depósitos de agua con filtro para «eliminar impurezas». No faltó detalle ni en la decoración ni en los trabajos estructurales de la casa, si bien el abandono al que ha estado sometida, con algún robo incluido, ha deteriorado notablemente el chalé. Los 34.032 euros que costó la valla exterior -127.912 euros con la jardinería- no fueron suficiente barrera para impedir la entrada de intrusos en el inmueble, ya cuando estaba en estado de abandono.

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