El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, mantiene el órdago con Madrid y ha solicitado al ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, «que no pida imposibles» a la Comunidad, en referencia a la reducción del déficit autonómico. Durante un acto en la provincia de Valencia, el jefe del Consell ha insistido en que el ministro «sabe perfectamente que la Comunidad Valenciana está infrafinanciada y que tiene dificultades porque ha habido una mala gestión», hecho que ha generado una situación a la que «hay que dar respuesta».

Y fue más allá. Puig insistió en que el Gobierno de la Generalitat no realizará nuevos ajustes pese a las exigencias de Madrid. «No estamos dispuestos a recortar más, porque recortar en Sanidad, Educación o Servicios Sociales sería inasumible para los valencianos», apostilló. El presidente se postuló en estos términos días después de que el Consejo de Política Fiscal y Financiera, el órgano que reúne al Ministerio con los consejeros de Hacienda de las distintas comunidades, acordara fijar el déficit de este año en un 0,7% frente el 0,3 previsto en un principio. Puig, no obstante, recalcó que «los problemas de España ante el déficit no son de las comunidades autónomas, sino, en gran parte, del Estado». E insistió en que desde el Consell continuarán «defendiendo el interés de los valencianos», pero lo harán, puntualizó, «desde el diálogo».

Por ello, deseó que el Gobierno central que salga de las urnas el próximo mes de junio sea «cómplice» de la Generalitat Valenciana y «comprensible» con sus ciudadanos; y no «un Gobierno que nos margine en la financiación, en inversiones y que no asuma la deuda histórica».

Momentos antes de participar en la manifestación con motivo del Primero de Mayo, el jefe del Consell también valoró ayer la próxima cita con las urnas. En concreto, aseguró que el PSOE debe configurar las listas al Congreso de los Diputados para las nuevas elecciones generales del 26 de junio pensando «en el interés general» de los ciudadanos y «no desde el particular de nadie».

Puig remarcó que su partido debe mirar por «representar dignamente» a los ciudadanos «progresistas» de España desde «una visión de unidad y cohesión». Así, destacó que Carme Chacón es «un referente muy importante de este país», de igual forma que Meritxell Batet «también lo es».

Por otra parte, y preguntado por algunas encuestas que sitúan a Podemos por encima del PSOE, Puig dijo que lo «fundamental» en estos momentos es «convencer a la mayoría social del país.