Les Cortes aprobaron ayer por unanimidad instar a la Generalitat a apoyar la producción y promoción de los vinos valencianos de calidad apostando por vincular su imagen a los territorios, a través de marcas diferenciadoras de calidad y Denominaciones de Origen (DO), tanto existentes como futuras. Entre ellas, la vinculada a la provincia de Alicante. La iniciativa, acordada por todos los grupos a partir de una propuesta del PSPV, pide también restablecer la situación previa a la orden de 2011 que aprobaba el reglamento de la denominación de origen protegida Valencia y devolver al resto de las denominaciones de origen de la Comunidad el reconocimiento de sus condiciones anteriores.

La socialista Sabina Escrig ha defendió el mantenimiento de denominaciones de origen diferenciadas en la Comunidad Valenciana. Destacó que el cultivo de la uva es «la única fuente de riqueza» de Utiel-Requena, que cuenta con una zona de producción de más de 35.000 hectáreas de viñedos, «la más grande» de la Comunidad Valenciana, y con una variedad de uva autóctona como es la bobal. El diputado del PP José Císcar defendió la búsqueda de acuerdos, consensos y soluciones para este sector, pero ha defendido la legalidad de la orden aprobada por el Gobierno anterior, del que formó parte como vicepresidente y conseller de Agricultura, y ha dicho que esta norma no fue «un capricho» de ningún conseller. Con este acuerdo se cierra la polémica de este tema.