La dirección provincial del PP en Alicante, comandada por José Císcar, quiere poner en orden las cuentas de sus distintas juntas locales. Tanto, que la cúpula del partido ha decidido imponer a todos los afiliados, unos 75.000 en la provincia, el pago de una cuota anual de 25 euros. Para los jóvenes, jubilados y desempleados, esa cuantía se verá reducida hasta los 18 euros. Hasta ahora, cada junta local del PP operaba de manera autónoma. Es decir, los militantes no estaban obligados a realizar aportaciones económicas y podían mantener el carné del PP sin necesidad de aportar un solo euro. Si, por el contrario, sí querían colaborar en la financiación de la formación, podían ingresar el dinero que estimaran oportuno, según admitieron ayer a este diario fuentes de la ejecutiva provincial.

Pero ahora, en pleno escándalo por la financiación irregular del partido en las campañas electorales de 2007 (autonómicas y municipales) y 2008 (generales), la Junta Directiva Provincial ha acordado fijar un pago obligatorio de 25 euros a todos los afiliados. La medida busca varios objetivos. El primero, cumplir a rajatabla la Ley Orgánica 3/2015, de control de la actividad económico-financiera de los partidos políticos. Esta norma, en vigor desde el 1 de enero de 2016, ha modificado la ley sobre financiación de los partidos y ha limitado las donaciones que pueden recibir.

En segundo lugar, la cúpula del PP quiere que todos sus militantes realicen una aportación económica para que la formación pueda sufragar sus gastos. Y es que los ingresos populares se han visto reducidos en los últimos años por tres motivos. Uno, que Orange Market -la empresa de Gürtel en la Comunidad- ya está en fuera de juego. Dos, que los empresarios han empezado a tirar de la manta y sus aportaciones irregulares previsiblemente pasarán a la historia. Y tres, que los batacazos del PP en las últimas elecciones han minado las subvenciones públicas que han venido recibiendo.

La cifra que podría recaudar el partido con la nueva iniciativa no es baladí. Si los 75.000 afiliados que afirma tener la dirección provincial abonaran esa cuota, la formación de la gaviota recibiría una inyección económica anual cercana al millón y medio de euros. Y todo legal. Ahora bien, en la avenida de Salamanca, cuartel de los populares alicantinos, son conscientes de que eso es una quimera.

En tercer y último lugar, esta iniciativa permitirá depurar el censo de militantes. Todos los presidentes provinciales que ha tenido el PP se han vanagloriado siempre del músculo del partido y han destacado que su formación era la que más afiliados tenía en Alicante. Lo que no decían era que, a diferencia de otros partidos como el PSPV, no era obligatorio pagar. Si los afiliados socialistas acumulaban varios impagos, perdían su condición. En el PP, sin embargo, eso no pasaba, como recalcaron ayer desde el entorno de José Císcar.

El abono de esa cuota acarreará una «contraprestación». Todos los militantes que la paguen podrán ejercer su derecho a voto en las primarias que supuestamente se celebrarán en los próximos congresos del partido, en los que se renovarán los cargos de dirección.

La cúpula del PP explicó esta medida a los presidentes locales en una reunión interna celebrada este pasado viernes por la tarde.