Ciudadanos (C's) no se aclara. La formación liderada por Albert Rivera ha ido dando bandazos en los dos últimos meses a cuenta de una comisión de investigación para fiscalizar los 12 últimos años del PP en la Diputación. Es decir, durante los dos mandatos de Joaquín Ripoll, imputado por graves delitos en el caso Brugal, y en la etapa de Luisa Pastor. Por partes.
La primera gran sorpresa llegó el miércoles 2 de febrero. Ese día, el pleno de la institución provincial abordó una iniciativa de Compromís, a la que se sumó el resto de grupos de la oposición (PSOE y EU) para impulsar esa comisión. Un día antes de que se celebrase la sesión plenaria, todos los grupos políticos con representación en la avenida de la Estación daban por hecho que ésta saldría adelante. ¿Por qué? Porque C's, el socio del PP en la Diputación, anunció que la avalaría. «Es bueno que esta legislatura comience sin ninguna sombra de sospecha», proclamó entonces el único representante de Ciudadanos en el Palacio Provincial, Fernando Sepulcre.
Esas palabras, sin embargo, se difuminaron apenas 24 horas después. C's matizó su postura del día anterior, se distanció de la oposición y presentó a última hora una enmienda a la totalidad de la propuesta de Compromís para que la fiscalización se realizara a través de una auditoría externa. Y el PP lo apoyó.
Resultado: no habrá comisión de investigación. La diferencia entre este tipo de fiscalización y una auditoría externa es notable. Mientras que en esta última se encarga toda la labor de revisión a una empresa ajena a la Diputación, en la comisión es la propia institución la que promueve las indagaciones. Los grupos políticos con representación en ella tienen la potestad de solicitar la comparecencia de aquellas personas que estimen oportunas y de formularles preguntas de manera directa. Esta práctica, sin embargo, no se ha extendido en la corporación provincial. La última comisión de investigación que se celebró data ya de hace dos décadas. Fue por el conocido caso PRISE, que indagó las adjudicaciones de un dirigente socialista desde la Diputación a una empresa suya. En las Cortes, por el contrario, las comisiones de investigación sí tienen una actividad destacada en la actividad parlamentaria.
Ese viraje de última hora de C's se produjo, curiosamente, justo un mes después de que la formación de Albert Rivera decidiera romper su pacto con el PP en la institución provincial. Tras las elecciones del pasado 24-M, los populares perdieron su mayoría absoluta en la avenida de la Estación y necesitaban el apoyo de C's. Y el partido naranja se lo dio. Declinó entrar en el gobierno, pero aupó a César Sánchez a la presidencia. Pero el 3 de febrero, esa entente se rompió. El PP incumplió su acuerdo con Ciudadanos y dio sueldo a dos diputados imputados: Bernabé Cano (PP) y Agustín Navarro (PSOE). Sepulcre compareció entonces ante los periodistas junto a los portavoces de la oposición y anunció la ruptura de la entente.
Los bandazos de C's han ido más allá. Tras vetar la comisión de investigación en la corporación provincial, el propio Sepulcre ha dado ahora marcha atrás en el pleno del Ayuntamiento de Alicante, del que forma parte como edil. Este pasado miércoles, los seis ediles de Ciudadanos, incluido Sepulcre, votaron a favor de una propuesta para solicitar a la Diputación la creación de una comisión de investigación para fiscalizar los últimos 12 años de gestión popular. Justo, lo que Sepulcre torpedeó un mes antes.
A todo ello se une, además, la postura que ha adoptado la formación de Albert Rivera en Valencia. El síndic del partido en las Cortes, Alexís Marí, anunció el pasado miércoles que C's solicitará que la futura comisión permanente sobre corrupción investigue la gestión del PP en la Diputación, especialmente en la era Ripoll. «Es esencial investigar la gestión política y económica de la institución provincial, especialmente durante la etapa de Ripoll, al que la Fiscalía Anticorrupción le pide 16 años de prisión», zanjó Marí.
Curiosamente, C's sí apuesta por impulsar una investigación en la Cámara autonómica, pero en Alicante no se aclara. En la Diputación Sepulcre rechazó esa propuesta, mientras que en el Ayuntamiento sí la avaló. Y si finalmente se celebra con el visto bueno de Ciudadanos, se podría producir una situación cuanto menos paradójica. ¿Por qué? Porque uno de los posibles políticos citados a declarar podría ser Emigdio Tormo, hoy coordinador provincial de C's en la provincia de Alicante y hace unos años alto cargo de la Diputación con Ripoll.
