El pleno del Consell solicitó ayer su adhesión al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) para acceder a los préstamos de la Administración central durante 2016 «ante la ausencia de una financiación adecuada», al tiempo que rechazó la aplicación de un interés del 0,834% a estas cantidades, lo que supondría una carga de 246 millones de euros a devolver por parte de la Generalitat, «una cifra que equivale casi a toda la aportación para atender a la dependencia en la Comunidad», explicó la vicepresidenta Mónica Oltra.

Oltra cargó con dureza contra «la perversión» del Gobierno central, «que quiere que, además, paguemos un castigo por la injusta infrafinanciación que sufre la Comunitat Valenciana». A su juicio, el planteamiento del Ejecutivo en funciones de Madrid equivale «al timo del falso premio», ya que propone «como una suerte, una magnanimidad del Gobierno y un chollo» el hecho de cambiar la financiación que, según Oltra, les corresponde por un préstamo.

La vicepresidenta de la Generalitat acusó al mismo Gobierno central que no quiso modificar el modelo de financiación de intentar «cambiar un derecho por un préstamo». Oltra recalcó que la «infrafinanciación» de la Comunidad la ha convertido en una «anomalía democrática», por lo que reclamó con urgencia un nuevo modelo justo. «Todo esto», prosiguió, unido al «saqueo» del anterior Consell «con el desvío de dinero fraudulenta e ilegalmente ha provocado que la deuda de la Comunitat supere los 40.000 millones de euros».

Auditorías sanitarias

Por otra parte, el Consell confía disponer en junio de los resultados de las auditorías financieras y sanitarias que se aplican a las empresas que gestionan departamentos de salud en régimen de concesión administrativa. Oltra admitió ayer que ya se han detectado algunas discrepancias en cuanto a liquidaciones por la prestación de servicios o inversiones. En el caso de Alicante, estas concesiones afectan a los departamentos de salud de Dénia, Torrevieja, y Elx-Crevillent.