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Director de los servicios jurídicos de Imelsa

José Luis Vera: "Imelsa era una empresa desregularizada con toda la intención"

«En Imelsa no han fallado los controles porque no existían», afirma

José Luis Vera

En esta macrocausa no deja de ser chocante que al final va a parecer que el héroe de la investigación es Marcos Benavent.

Por supuesto que no. Él ha colaborado por pura necesidad de reducir la condena. Hay que destacar sobre todo la aportación de la UCO de la Guardia Civil, la Fiscalía y el Juzgado. Aquí hay una investigación en marcha desde antes de que se aportaran las grabaciones. La colaboración de Imelsa ha sido máxima en temas concretos. Se ha destripado de arriba a abajo la empresa y nos pusimos a disposición de la Justicia, empezando por facilitar que toda la documentación que se llevó Benavent fuera entregada a la investigación. Hicimos también una auditoría forense exclusivamente del año 2014, porque los anteriores ya habían sido revisados por la Agencia Tributaria. Y eso también se entregó al juzgado. Y fuimos a denunciar a la Fiscalía la trama de facturas falsas que descubrió la Agencia Tributaria. Pero éste no es el caso Imelsa.

Hace tanto daño a la marca que el nuevo gobierno provincial se planteó liquidar la empresa.

Un daño inmenso. Mire cómo ha sido que técnicos de la empresa han borrado de su perfil de Linkedin cualquier referencia a esta casa. Ha hecho daño a muchas personas honestas que han trabajado o trabajan en la empresa. Sobre la liquidación es verdad que había dudas políticas, pero aquí nunca hemos tenido dudas. Esta empresa es muy viable. Lo que se ha hecho aquí en seis meses es una referencia en España del buen hacer en la gestión de recursos públicos.

¿Han fallado los mecanismos de control de Imelsa, de la diputación o todos en general?

En Imelsa no han fallado porque no existían. Era una empresa desregularizada adrede. La contratación de obras y servicios y de personal se hacía sin control ni vigilancia. La diputación ha fallado en los controles, ha fallado la Intervención, el consejo y la junta general de la empresa, la estructura entera. Desde el primer día hemos prestado el máximo nivel de colaboración para sacar la porquería y poner mecanismos de control para que no vuelva a ocurrir. Estamos poniendo en marcha el sistema de Corporate Compliance de responsabilidad corporativa. Es un control y vigilancia de última generación. Esta era una empresa bajo sospecha y ahora es un búnker contra la corrupción, gracias también a la colaboración de los trabajadores.

Y tras el éxito que el presidente de la diputación ha destituido a Tíller como gerente.

José Ramón Tíller ha cumplido con sobresaliente en la etapa más compleja de la empresa y ahora se da lugar a un segundo impulso, más dirigido a reorientar la empresa hacia sus fines verdaderos, empezando por la atención a los ayuntamientos.

Siempre se habla de los políticos, pero en este caso se ha visto que la implicación de funcionarios y técnicos ha sido clave para montar la trama.

Es evidente que la corrupción no es un fenómeno estrictamente de políticos. Muchos expedientes de contratos que han sido presuntamente objeto de comisiones están niquelados, muy bien hechos, el problema es si se compra a los miembros de la mesa de contratación, al que hace los pliegos, a técnicos y funcionarios... Es el momento de dar un paso cualitativo para establecer controles 100% independientes de las administraciones, controles a degüello y sin piedad. Hay que dotar, además, al sistema con personal, dinero y capacidad. La UCO trabaja con medios de hace 30 años y aún así mire los resultados. La labor policial y judicial es alucinante, brutal si observas la escasez de medios. A mí que se haga una Secretaria de Estado contra la corrupción me parece de risa. ¿Controlar la corrupción desde el Ejecutivo? Estamos listos.

¿El día que un partido denuncie a uno de los suyos se empezará a ganar la batalla contra la corrupción?

Sería una de las muestras de que hay voluntad social de regeneración. O que un juez denuncie a otro o un obispo a un arzobispo.

La UDEF abroncó al notario de un cabecilla de la trama Avialsa, del caso Castellano, por avalar operaciones sospechosas. Ya era hora.

En la cadena de montaje de la corrupción o para un lavado de dinero se necesitan economistas, juristas, notarios, expertos en fiscalidad, en mercantil, banqueros... Es así y nadie escapa al control.

PSPV, Compromís y EU entienden que la UCO ha citado a declarar a diputados suyos por decisión política, para que no sea un caso PP. Rosa Pérez (EU) incluso denuncia una persecución por haber sido la denunciante.

¿Decisiones políticas de la UCO? No creo en las conspiraciones de Estado. España no es Rusia ni Corea del Norte. La UCO es policía judicial y por tanto depende de un poder independiente del Ejecutivo. Son cuerpos que llevan en su ADN la cultura de servicio público y están alejados del día a día de la Administración y por eso la ven con más perspectiva. Hoy habría que redefinir los poderes del Estado y crear un cuarto poder conformado por los órganos de control del resto de poderes.

Detenciones y registros casi dos años después de una investigación. ¿Cuánto de ejemplaridad y espectáculo hay en las operaciones policiales-judiciales?

Siempre hay una liturgia y un mensaje de ejemplaridad que, con sus inconvenientes, en general es positivo, didáctico en el sentido de disuasorio. El corrupto percibe que pueden pillarlo. Está más que probado que las soluciones están en la política criminal. El corrupto no evitará serlo porque aumenten las penas, sino porque se incremente el riesgo de ser pillado.

¿Qué piensa de los efectos colaterales de las medidas higiénicas que adoptan los partidos cuando hunden a alguien sin haber sido condenado?

Lo que no se puede hacer es desenfocar el problema de la corrupción. Esto no mejora la lucha contra la corrupción. Esto solo beneficia al verdadero corrupto, que se oculta tras un mar de ruido esperando a que pase la marea, y como la vida de la información en los medios es tan fugaz, al poco tiempo se olvidan de él, y se consigue que sea más noticia el sacrificado que el verdadero corrupto, que sigue ahí. Los políticos han de tener valentía e inteligencia para hacer pedagogía y luchar contra los vendavales con razones y explicaciones a la gente, y no adoptar decisiones de burdo linchamiento para satisfacer a quien hace más ruido. Es más, no creo que la gente pida sangre, lo que queremos es seriedad, credibilidad, ejemplaridad y medidas de fondo y no solo cosméticas.

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