Una auditoría de la Diputación sobre la gestión del año 2013 revela el descontrol del Patronato de Turismo en la gestión de su patrimonio y en el reparto de las ayudas para promoción turística. Guardado en un cajón bajo siete llaves desde hace unos meses cuando se completó, el informe que analiza la labor del ente durante el mandato de Joaquín Albaladejo, hoy diputado en Madrid, destapa que este organismo autónomo dependiente de la institución provincial había «perdido» un inmueble en Polop, un traje, una cámara web, una aplicación informática y una torre de vigilancia valorados en algo más de 200.000 euros. Pero, además, en pleno debate sobre el futuro de los presupuestos turísticos de la Diputación, el fiscalizador pone sobre el tapete otro argumento que traerá cola: más de la mitad de las subvenciones que entregó el Patronato de Turismo durante ese ejercicio -concretamente un 55%- se repartieron de forma discrecional y sin ninguna justificación.
De los siete expedientes que el auditor tomó como muestra para analizar el listado de bienes, cinco presentan irregularidades. De acuerdo con el informe y conforme a la documentación, a la Diputación le había «desaparecido» un inmueble en Polop para oficina turística por valor de 72.930 euros, un traje de 793,51, una aplicación informática tasada en unos 120.000 euros, una torre de vigilancia por cerca de 6.000 euros y, finalmente, una cámara web por valor de unos 3.000 euros, «no habiéndose podido tener evidencia de su existencia», recoge textualmente el informe. «Hay al menos 202.472 euros desaparecidos. De forma aleatoria, el 70% de los bienes solicitados y pagados con dinero público no aparecen», denunció el portavoz de Compromís, Gerard Fullana. La Diputación atribuyó anoche ese descontrol a un retraso en el inventariado que ya se subsanó cuando se conoció el detalle de la auditoría.
Pero además, junto al caos en el listado de patrimonio, la auditoría pone en cuestión el sistema de reparto de ayudas del Patronato de Turismo. Más de la mitad se concedieron de forma discrecional al gusto de los rectores políticos del organismo. «El 55% del total de las subvenciones concedidas en el ejercicio se tramitan mediante el procedimiento de concesión directa, sin que se justifiquen los motivos para su tramitación por este procedimiento», recoge textualmente el documento que, además, recomienda que las ayudas a partir de ahora se concedan a través de una convocatoria pública. Ese descontrol, de acuerdo con las conclusiones del informe sobre la gestión del Patronato de Turismo en 2013, también aparece con el gasto publicitario para promoción turística. La auditoría lo cifra en 683.454 euros, de los que, sin embargo, 546.592 -casi ocho de cada diez euros-, «no se corresponden con ninguna campaña en concreto». A juicio de Compromís, estamos ante un «exceso» de financiación del organismo, que recibe sus fondos directamente de las arcas provinciales.
«Caos y falta de transparencia»
Para Gerard Fullana, portavoz de Compromís en la Diputación, la auditoria evidencia dos carencias graves. «El caos en la gestión del dinero público» en los organismos autónomos; y, dos, «la deriva poco transparente» del equipo de César Sánchez al «ocultar este informe». Según Compromís, la Diputación tiene «desde hace meses» una auditoria que considera un «estudio superficial que solo podría estar señalando el camino de un grave caso de irregularidades». «Cada día es más evidente que las prácticas irregulares están presentes en la gran mayoría de las instituciones gobernadas por el PP», concluyó Fullana.
