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Críticos con Echávarri se unen para revitalizar el PSOE en Alicante

El actual secretario general en la ciudad tendrá que renovar el cargo en unos meses

El secretario general del PSOE en Alicante, Gabriel Echávarri, durante la última asamblea. héctor fuentes

Con la vista puesta en las elecciones internas previstas para el próximo verano, el sector crítico con el actual secretario general en Alicante, Gabriel Echávarri, ha empezado a preparar nuevas acciones que visibilicen la «inactividad» que atraviesa a día de hoy la agrupación con sede en Pintor Gisbert. Una estrategia de desgaste ante la cita electoral a nivel orgánico en la que el actual alcalde de la ciudad de Alicante tendrá que exponerse ante las bases para renovar su cargo en el partido.

En la última reunión del sector crítico, celebrada fuera de la Casa del Pueblo, medio centenar de militantes acordaron «retomar» la agrupación socialista en Alicante «actualmente inmersa en la inactividad». Para ello, prevén realizar diversas actividades y reuniones que servirán, sobre el papel, para visibilizar ante las bases con derecho a voto el modo «off» que vive hoy el partido, a juicio del sector crítico con Echávarri.

Entre las acciones que se pusieron negro sobre blanco destacan la celebración periódica de reuniones con objetivos heterogéneos, desde tratar asuntos que afectan al PSOE, a asuntos que atañen a la ciudad de Alicante y al gobierno municipal y también encuentros sectoriales sobre temas que se consideren de primer orden tanto social como políticamente. También se busca convocar a militantes para trabajar en asuntos referentes a la celebración del Congreso Federal, fechado a finales de mayo. Los críticos quieren llevar la voz cantante creando comisiones de trabajo que estudien aspectos, documentos y ponencias ante la importante cita del PSOE nacional.

Es decir, el sector crítico con Echávarri -donde se agrupan militantes de base, pero también exdirigentes con larga trayectoria en el partido- pretende poner en marcha la maquinaria interna para intentar conseguir un relevo al frente del partido en la ciudad de Alicante. Para ellos, el hecho de que el PSOE haya vuelto a ostentar la Alcaldía -gracias al pacto con Guanyar y Compromís- después de una travesía por el desierto de veinte años no es motivo suficiente para que Echávarri siga al mando del partido en la capital de la provincia. Alegan desde el sector crítico que su liderazgo es inexistente y que está llevando al partido a los peores resultados de la historia en la ciudad. De hecho, en las pasadas municipales, el PSOE logró 6 concejales de los 29 del Ayuntamiento de Alicante. Seis meses después, en las pasadas generales, los socialistas estuvieron a menos de 200 votos de quedarse como cuarta fuerza política en la ciudad, al ser superados con claridad por el PP, por la coalición Compromís y Podemos y situarse bien cerca de «claudicar» ante Ciudadanos.

Estos datos se unen a la fuga de militantes y a la escasa participación de los socialistas con carné existentes en la ciudad. En la última asamblea ordinaria, a finales del pasado mes de julio y aún cuando resonaba el éxito de recuperar el bastón de mando, apenas 178 de los por entonces 826 militantes acudieron a la llamada del partido. Ese hecho, entre otros, preocupa a los críticos con Echávarri, que defienden que el partido acabará muerto por inanición si no se cambia la actual cúpula.

Este movimiento de unidad no es el primero que dan los críticos con Echávarri. En octubre, a dos meses de las generales, los «díscolos» se unieron en una plataforma de apoyo a Pedro Sánchez, que sirvió como primer gesto público para crear una alternativa real para desbancar al actual secretario general del PSOE en Alicante y también a su «padrino político», el polémico Ángel Franco.

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